Primeras palabras de la víctima de La Manada tras la rebaja en la condena a uno de sus violadores: "No podré rehacer mi vida"

Primero fue violada salvajemente por cinco hombres en un portal de Pamplona durante los Sanfermines de 2016. Luego, sufrió el acoso de otra "manada virtual" que, desde el anonimato de la red, la cuestionó e insultó durante meses, aprovechando el voto particular del juez que vio "jolgorio" en el vídeo que grabaron sus violadores. Ahora, la víctima de La Manada intenta comprender y digerir por qué la justicia ha rebajado la condena a uno de sus agresores.

"Otra vez me dejan a los pies de los caballos, no voy a poder rehacer mi vida nunca". Estas han sido las primeras palabras de la joven, según apuntan desde el entorno de la víctima a CASO ABIERTO, tras saber que el Tribunal Superior de Justicia de Navarra cambia de 15 a 14 años de prisión la pena de Ángel Boza, en aplicación de la ley del 'sí es sí', como había solicitado el condenado.

Una ley que no pidió

Su abogada, Teresa Hermida, ya trabaja en el recurso con el que se opondrán ante el Tribunal Supremo a esta decisión judicial y lamenta el "efecto devastador" que la resolución del TSJN ha causado en la víctima y en su familia. "Ella no entiende que una ley que casi lleva su nombre, a pesar de que ella nunca la pidió ni abanderó, haya acabado beneficiando a uno de sus violadores. Se siente decepcionada y, lo más preocupante, otra vez revictimizada", denuncia.

La rebaja en la condena de Boza supone un duro golpe en el proceso de recuperación de la joven, que lleva siete años en tratamiento psicológico, tuvo que abandonar sus estudios universitarios e incluso marcharse durante al menos tres meses a vivir al extranjero. "Esta decisión judicial para ella es la gota que colma el vaso en un proceso al que la chica no ve el final", lamenta Hermida.

Revictimizada

"Tiene la sensación de que nunca le dejarán superar lo que ha sufrido. Cuando parece que está saliendo adelante, con mucho esfuerzo, siempre llega algo que la devuelve al día de la violación y vuelta a empezar", añade.

La abogada recuerda que la víctima ya tuvo que hacer frente a la filtración de sus datos personales e incluso de las imágenes de su agresión sexual: "Hablamos de una chica muy joven que ha sido agredida sexualmente, cuestionada e insultada públicamente por sus violadores y por algunos jueces, puesta en duda por una parte de la sociedad, acosada en redes sociales, que ha visto su nombre y hasta el centro donde estudia publicados por todas partes, que ha soportado que uno de sus agresores le escribiera una carta de perdón ficticio para tratar de obtener permisos penitenciarios...".

La decisión del TSJN es "la gota que colma el vaso" en todo ese periplo que la víctima lleva sobre sus hombros desde hace siete años", añade Hermida. La abogada señala que la chica está muy agradecida "a todas esas personas, sobre todo mujeres, que la han defendido y apoyado siempre", pero recuerda "la importancia que tiene para una víctima de violación sentir que puede confiar en el sistema, en las instituciones". Una confianza que, a la vista de todo lo ocurrido, en el caso de la víctima agredida por La Manada está cada vez "mas mermada".