Un devastador incendio tuvo lugar ayer por la noche en el peor escenario posible. En medio de un vendaval, con rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora, un fuego iniciado poco después de las seis de la tarde en s’Albufera de Muro seguía ayer fuera de control, por lo que el Ibanat lo calificó de nivel 2, lo que implica graves riesgos para residencias. Varias viviendas de la zona de ses Cases de Son Sant Martí fueron desalojadas por sus habitantes ante la proximidad de las llamas. El Ibanat movilizó a todos sus efectivos disponibles, que trabajaban junto a los Bombers de Mallorca de los parques de Alcúdia e Inca. A pesar de ello, el fuego seguía fuera de control anoche.

El fuego se declaró a las seis y diez de la tarde en uno de los extremos de s’Albufera, en la carretera de Muro a Can Picafort, junto al camí de s’Amarador. El fuerte viento empujó con inusitada rapidez las llamas, que se extendieron por una enorme área de cañizo, muy seco tras los meses de verano.

Desde el principio el fuego provocó unas imágenes impactantes, con una gran ola de llamas que avanzaba con rapidez sobre el cañizo. Tres helicópteros del Ibanat trabajaron en la zona hasta que la caída de la noche hizo inviable el vuelo, con lo que las tareas de extinción tuvieron que llevarse a cabo por tierra. Junto a los bomberos de los parques de Alcúdia e Inca trabajaron todos los efectivos disponibles del Ibanat, unas cincuenta personas.Varias viviendas de las Cases de Son Sant Martí fueron desalojadas por sus propios moradores, alarmados por la cercanía y voracidad de las llamas. A las ocho de la tarde el Ibanat declaró el incendio de nivel 1, que implica riesgo para infraestructuras y viviendas. A las nueve se decretó el nivel 2, que alerta del peligro para las personas. El fuego seguía fuera de control anoche.

Las condiciones meteorológicas eran las peores posibles, con un ambiente muy seco y en medio de un vendaval, con rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora.

Los miembros de los

Los miembros de los equipos de extinción trabajaban ayer para frenar las llamas. 

Sobre las ocho de la tarde se ha informado de que varias viviendas de la zona conocida como ses Cases de Son Sant Martí han tenido que ser desalojadas ante el riesgo que suponía la proximidad del fuego.

En el lugar están trabajando unos cincuenta efectivos del Ibanat, así como los Bombers de Mallorca de los parques de Inca y Alcúdia. Sin embargo, en estos momentos el fuego sigue fuera de control.