Pega un puñetazo a un turista que había tirado un vaso al suelo en s'Arenal

La Policía Local de Palma ha detenido en s'Arenal a un hombre por agredir a un turista que había tirado un vaso al suelo. El acusado supuestamente propinó un fuerte puñetazo en la cara a la víctima porque no le hizo caso cuando le dijo que lo arrojara a una papelera. Además, se enfrentó a las dos policías que lo arrestaron.

Los hechos ocurrieron hacia las cinco y cuarto de la madrugada del jueves. Una dotación de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) que patrullaba por la calle Cartago fue requerida por un turista de 19 años, que en inglés, manifestó a las dos agentes que un individuo muy violento le había dado un puñetazo en la cara sin motivo. El joven mostró las lesiones que había sufrido a la altura del ojo izquierdo.

Mientras explicaba los hechos, señaló a una persona que iba andando a unos metros de distancia como el agresor. Inmediatamente, las policías se dirigieron hacia él y le pidieron la documentación y su versión de los hechos. El sospechoso contó que estaba sentado sobre una pequeña pared fumando un porro de marihuana cuando vio que el turista dejaba un vaso en el suelo. Le dijo que lo tenía que coger y echarlo a la papelera, pero como se había negado le propinó un puñetazo.

Cuando las policías le pidieron que se identificara formalmente, el acusado les entregó una riñonera diciéndoles que la buscaran ellas. En el interior de la bolsa no encontraron ninguna clase de documentación, pero sí había una bolsita con una sustancia que parecía ser marihuana.

Dado que seguía sin querer identificarse, ni siquiera verbalmente, las policías le indicaron que tenía la obligación de hacerlo y que podía estar incurriendo en un delito. En este momento, el acusado incrementó su agresividad las agentes tuvieron que echarse atrás para mantener la distancia de seguridad mínima y proteger su integridad.

Insultos a las policías

Ante la actitud del acusado, las agentes le detuvieron por un presunto delito de lesiones y otro de desobediencia grave. Ya en el cuartel de Sant Ferran, el sospechoso insultó gravemente a las policías y les lanzó un vaso de agua.

Finalmente, facilitó su nombre y mediante la base de datos de la Policía Nacional fue identificado como ciudadano belga de 29 años y residente en España. Una vez finalizados todos los trámites del atestado fue presentado ante el juez de guardia.