Un joven sudafricano de 22 años, residente en Palma, murió ayer tras precipitarse desde una altura de veinte metros en sa Foradada. La Guardia Civil y Bombers de Mallorca se movilizaron para rescatar el cuerpo de un lugar muy escarpado.

El trágico accidente ocurrió sobre las dos y media de la tarde. El joven sudafricano y un amigo se encontraban haciendo una excursión entre la cala y la roca de sa Foradada, en el termino municipal de Deià. Al parecer, la víctima perdió el equilibrio y cayó al vacío de pie. El primer impacto contra un saliente le fracturó los tobillos, pero luego rebotó y se precipitó de cabeza unos veinte metros hacia una muerte segura.

Su amigo, en estado de shock, avisó a los servicios de emergencias. Efectivos de la Guardia Civil y de Bombers de Mallorca se movilizaron para recuperar el cuerpo de la víctima. El cadáver había quedado en un lugar muy abrupto de difícil acceso. Una vez que los servicios de rescate llegaron al punto donde se encontraba la víctima, la evacuaron por mar.