Una patrulla policial se percató de que un sujeto conducía en La Soledat con una cacatúa en el salpicadero del coche. El ave había sido sustraída, junto con otros dos loros, de un vehículo estacionado en el aparcamiento de un restaurante de Palma, situado en la carretera de Llucmajor El delincuente había perpetrado poco antes el robo en una gasolinera. Tras localizar en el maletero la caja registradora robada de la estación de servicio y certificar que se trataba de un animal robado, el individuo ha sido detenido por varios delitos de robos con fuerza.

Los hechos ocurrieron la mañana del lunes en el barrio palmesano de La Soledat. Una patrulla de la Policía Nacional reparó en un individuo que llevaba una cacatúa suelta en el salpicadero del coche. Se trataba de un caro animal, de la variedad alba, valorado en unos 5.000 euros. Los agentes pararon al conductor. Tras realizar gestiones, los policías averiguaron que el ave había sido sustraída poco antes en el aparcamiento de un restaurante de la carretera de Llucmajor.

A continuación, los agentes registraron minuciosamente el vehículo y encontraron en el interior una caja registradora. Este objeto pertenecía a una gasolinera, situada a escasos metros del restaurante donde había sustraído el ave,. El ladrón se había hecho con un exiguo botín de tan solo 12 euros tras perpetrar un golpe poco antes de robar los loros. El sujeto fue detenido por dos delitos de robos con fuerza y daños.

El delincuente ya había intentado robar en el mismo restaurante en la mañana del día anterior. En esa ocasión, la fechoría fue frustrada por los vigilantes de seguridad del establecimiento.

Además de la cacatúa recuperada, el ladrón también robó, presuntamente, otros dos raros ejemplares de loro de los que se desconoce por completo su paradero. La Policía Nacional ha pedido colaboración ciudadana para tratar de recuperarlos también. Uno de ellos es un loro verde, de la variedad amazonas. El otro es una cotorra del sol de un color rojo muy vivo.