El día de Reyes se convirtió ayer en un incesante goteo de accidentes de tráfico en Mallorca. Por fortuna ninguno fue tan trágico como el ocurrido de madrugada en Manacor. En el peor de los casos solo hubo que lamentar heridos leves, pese a la aparatosidad de algunos de estos siniestros.

Así, sobre las dos y media de la madrugada un coche volcó en la calle Fray Junípero Serra de Palma, después de chocar contra un vehículo estacionado. Al encontrarse bajo los efectos del alcohol, solo el conductor pudo salir por sus propios medios. Una mujer quedó atrapada. Bombers de Palma acudieron al lugar y la sacaron sin necesidad de utilizar herramientas.

Sobre las once de la mañana, un accidente en cadena tumbó el poste del aparcamiento público de las Avenidas, frente a la Estación Intermodal de Palma.

Un automóvil Honda se encontraba a esa hora detenido en el semáforo en rojo junto a la entrada y la salida del aparcamiento público cuando sufrió un fuerte impacto por detrás, provocado por el conductor de una furgoneta Renault. El choque fue tan fuerte que el automóvil detenido salió disparado unos metros, subió a la acera lateral e impactó con fuerza contra la señal del aparcamiento, que quedó tumbada.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes de la Policía Local de Palma, que dieron parte de los hechos y comprobaron que ninguno de los dos conductores había sufrido daños importantes.

Colisión de dos vehículos

En torno a las cinco y media de la tarde seis personas resultaron heridas de carácter leve a raíz de una colisión entre dos coches en Bahía Grande, en el término municipal de Llucmajor. Al parecer uno de los vehículos se saltó un ceda el paso y colisionó con el otro coche que circulaba en sentido contrario. Varias ambulancias acudieron al lugar.

Por último, sobre las siete de la tarde, un coche sufrió un aparatoso incendio junto al Coll den Rabassa en la autovía de Llevant. El vehículo quedó destrozado, pero sin heridos.