El enfrentamiento entre los bomberos del Consell de Mallorca y la administración se ha agudizado. La representación sindical del Cuerpo pidió reiteradamente una reunión con la presidenta del Consell, María Salom, sin obtener respuesta. El Dijous Bo lo aprovecharon para dejar constancia de su malestar y de sus reivindicaciones. La respuesta a la protesta se la ha hecho llegar la Delegación del Gobierno de Balears en forma de elevadísimas multas.

Un bombero alargó el brazo para entregar un panfleto con el contenido de la protesta. Su objetivo era la presidenta del Consell. En la sanción se le acusa como "promotor y organizador de concentraciones y manifestaciones y por entrega de un folleto al president del Govern". La multa: 1.000 euros. Según CCOO, el asunto es aún más descabellado porque el panfleto "no se lo llegó a entregar". No ha sido la única sanción impuesta. A otro bombero sindicalista presente en la protesta del Dijous Bo se le ha notificado esta semana otra multa de una cuantía muy elevada. Un total de 600 euros por manifestarse.