La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma decidió absolver al recepcionista de un hotel de Sóller de un presunto delito de agresión sexual a una compañera. El tribunal no halló indicios de que no hubiera consentimiento por parte de la víctima.

Los hechos ocurrieron sobre las siete de la tarde de mayo de 2009 en la habitación 311 del establecimiento. La sentencia recoge que entre los dos empleados hubo "una rápida relación sexual" después de que la camarera de habitaciones llamara al recepcionista.

El fiscal pedía para el procesado una pena de nueve años de prisión. También solicitaba una indemnización a la víctima de unos 1.000 euros.

El tribunal sustenta el fallo absolutorio en las declaraciones de numerosos testigos que aseguraron durante la vista que les habían visto "juntos, muy agarrados". En otras ocasiones. El médico forense que exploró a la supuesta víctima tampoco encontró en sus genitales signos compatibles con una agresión sexual.