­La Audiencia de Palma ordenó ayer el ingreso en prisión del falso bróker juzgado esta semana por una presunta estafa de cuatro millones de euros a decenas de inversionistas de la isla. La acusación solicitó la prisión provisional al final de la vista oral al argumentar que existía riesgo de fuga del sospechoso. Y el tribunal de la sección segunda acordó que el imputado fuera encarcelado.

La fiscalía y el abogado de la acusación particular, Antoni Monserrat, pidieron siete años y medio de prisión para el falso bróker de bolsa por un delito de apropiación indebida. El hombre habría simulado grandes beneficios con operaciones que no llegó a realizar entre 2002 y 2006.