El propietario del local Farra Latina, que durante la madrugada del domingo fue inspeccionado por parte de la Policía Local de Palma, manifestó ayer que su establecimiento tiene en trámite la licencia de apertura como café concierto. El empresario recalcó que los agentes no encontraron deficiencias salvo tener las puertas abiertas con la música en macha y que no le precintaron su local ni sus altavoces.
Durante la noche del sábado al domingo la Policía Local realizó una serie de inspecciones en otros establecimientos nocturnos ubicados en Gomila, Can Valero y Son Castelló. El dispositivo policial se saldó con el cierre de una discoteca que no tenía licencia y con el precinto de los altavoces de otros locales de ocio nocturno. Además, cinco clientes fueron sancionados por tenencia de drogas.
