­La Policía Judicial de la Guardia Civil de Inca arrestó ayer por la mañana a un hombre de 51 años como presunto autor del incendio que el martes destruyó un domicilio en la calle Sant Bartomeu de la ciudad. Los investigadores descubrieron que el hombre, que residía en la casa pero estaba a punto de ser desahuciado, había preparado otros fuegos en dos casetas de campo de los mismos propietarios, que él se encargaba de cuidar.

El hombre había estado trabajando cuidando de un anciano, cuya familia le había dejado la casa de la calle Sant Bartomeu. Cuando este hombre falleció, sus familiares trataron de expulsarle del domicilio, y como se había negado, habían iniciado un proceso legal para desahuciarle.

Parece que ante su inmimente expulsión, el hombre presuntamente decidió destruir la vivienda. Habría colocado varias bombonas de butano abiertas y dejado la chimenea encendida, lo que provocó una deflagración. Las bombonas no explotaron, lo que evitó un resultado desastroso.

Ayer por la mañana fue detenido por la Guardia Civil cerca de Inca. Los agentes descubrieron que había colocado bombonas abiertas junto a velas encendidas en dos casetas que la misma familia tiene en una finca rústica.