Evacuan a 500 personas en el sur de El Hierro ante el riesgo volcánico

La alerta de riesgo volcánico pasó ayer a nivel rojo en La Restinga, en el sur de El Hierro, ante la posibilidad de que se produzca una nueva erupción más cercana a la costa, por lo que las autoridades decidieron evacuar a unos 500 vecinos a Valverde y otros puntos de la isla.

El director general de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, Juan Manuel Santana, explicó que esta medida (en el resto de la isla continuaba la alerta amarilla) se toma con carácter preventivo, ante las señales sísmicas que indican que es probable que se produzca una nueva erupción en aguas más próximas a la costa y menos profundas que la que se registró el lunes.

Santana prefirió no hablar de "evacuación", sino de "traslado preventivo", porque la situación podría cambiar y permitir el regreso de los vecinos a sus casas.

Sin embargo, sobre el terreno, el personal de Cruz Roja y de los Ayuntamientos de El Pinar y Frontera prepararon al medio millar de habitantes de La Restinga para llevarlos al polideportivo de Valverde, a un albergue de emergencia en la localidad de San Andrés o a otros puntos de la isla con sus familiares.

Los vecinos de La Restinga se enfrentaban a esta situación apenas 24 horas después de conocer que la temida erupción se había producido en el Mar de Las Calmas, a cinco kilómetros de la localidad y a unos mil metros de profundidad, una noticia que habían recibido con cierta tranquilidad y alivio.

Nuevas erupciones

Sin embargo, los equipos del Instituto Geográfico Nacional y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas desplazados a la isla detectaron señales que indican que podría producirse una nueva erupción en aguas más superficiales y cercanas a la costa, donde la irrupción del magma podría provocar explosiones.

"¿Dónde va a ser exactamente? Todavía no sabemos. Pero cercana a la costa y con menor profundidad", apuntó Santana.

Por su parte, el presidente del Cabildo de El Hierro, Alpidio Armas, insistió en La Restinga que se traslada a la población para garantizar su seguridad ante una posible nueva erupción.

"Lo que se desconoce es cuándo saldrá, dónde y la virulencia", indicó Armas, que por ello ha explicado que es necesario garantizar que las personas estén a salvo. Como Santana, el presidente del Cabildo ha incidió en que se trata de una "reubicación" de los vecinos y no de una "evacuación".

Mientras tanto, todos los vecinos de La Restinga permanecían concentrados en el campo de fútbol de la localidad, mientras se procedía a tomar nota de aquellos que no se pudieran alojar en casas de familiares o amigos, y que estaba previsto que fueran trasladados al pueblo de San Andrés.