Un hombre de 56 años de edad, llamado Francisco Javier M.L.., ha sido condenado por la jueza del juzgado de lo penal número 2 de Palma. El acusado se confesó culpable de tres delitos de abuso sexual, cometidos contra su nieta, de sólo diez años de edad. El hombre, que fue denunciado por los servicios sociales del Consell Insular de Mallorca, ha sido condenado a cumplir dos años de prisión. También se le ha impuesto una pena de multa de 24 meses por uno de los delitos.

Los hechos ocurrieron en Palma el pasado año. La nieta tenía diez años de edad y se da la circunstancia que vivía en el domicilio de sus abuelos que, además, eran los responsables de su custodia.

Según declara probado la sentencia, el abuelo dormía con su nieta y aprovechaba esta circunstancia para realizarle tocamientos por la zona vaginal. Al menos, la menor recordaba que estos hechos se habían repetido en tres ocasiones. Siempre sufría estos tocamientos de noche, cuando estaba acostada en la cama durmiendo junto a su abuelo.

Los hechos los descubrieron las trabajadoras del servicio de asuntos sociales del Consell. La niña contó que su abuelo estaba abusando de ella. Los servicios sociales pusieron el caso en conocimiento de la fiscalía de menores de Palma, que presentó después una denuncia en el juzgado. Esta denuncia se formuló en el mes de julio del pasado año.

El acusado no llegó a ser nunca detenido. El pasado miércoles fue citado para que compareciera ante el juez acusado de tres delitos de abuso sexual, por los que la fiscalía solicita penas de prisión.

La acusación alcanzó un acuerdo con el abogado defensor. El hombre se confesó culpable de los delitos que le imputaba la fiscalía.

Como consecuencia de estos hechos tan graves al acusado le retiraron la custodia de su nieta. La sentencia le prohíbe acercarse a la niña.