Los juzgados de Vía Alemania acogieron ayer un juicio en el que comparecieron tres vendedores de artesanía que tienen un puesto en la Plaza Mayor de Palma por una pelea mantenida con un malabarista que actuaba en las inmediaciones.

Los vendedores explicaron que el artista, con sus juegos, les espantaba los clientes y que se ponía cerca de ellos, con el riesgo de que las mazas pudieran caer sobre su chiringuito.

El malabarista, por su parte, aseguró que fueron los vendedores quienes empezaron la pelea.

Los hechos sucedieron durante las pasadas fiestas de Navidad.