Polémica en el Reino Unido

J.K. Rowling carga contra la nueva ley antiodio de Escocia para proteger a las personas trans

La escritora considera que la legislación supone un ataque contra la libertad de expresión

La norma castiga con hasta siete años de cárcel las amenazas por motivos de "identidad transexual"

Lucas Font

La implementación de una nueva ley para proteger a las personas trans de los delitos de odio ha generado una importante controversia en Escocia. La norma, que castiga con hasta siete años de cárcel el comportamiento abusivo y las amenazas en las redes sociales por motivos de "identidad transexual", ha provocado las críticas de algunos grupos feministas, que se niegan a reconocer como mujeres a las personas nacidas con el sexo masculino y que consideran que la nueva ley representa un ataque contra la libertad de expresión. La escritora J.K. Rowling, una de las voces más críticas con los derechos del colectivo, ha vuelto a mostrar su rechazo a la norma esta semana y ha instado a las autoridades a arrestarla tras lanzar nuevos ataques contra las mujeres trans. 

El primer ministro británico, Rishi Sunak, apoya a la autora de 'Harry Potter': "No se debe criminalizar a la gente por exponer simples hechos sobre biología. Creemos en el derecho a la libertad de expresión"

"Los legisladores escoceses parecen haber dado más valor a los sentimientos de los hombres que interpretan su idea de la feminidad, aunque sea de forma misógina u oportunista, que a los derechos y libertades de las mujeres y niñas reales", ha escrito la autora de la saga 'Harry Potter' en las redes sociales. "La redefinición de ‘mujer’ para incluir a todo hombre que se declare como tal ha tenido ya graves consecuencias para los derechos y la seguridad de las mujeres y las niñas en Escocia, y el impacto más fuerte lo han sufrido, como siempre, las más vulnerables, entre ellas las reclusas y las supervivientes de violación", ha añadido antes de desafiar a las autoridades escocesas a arrestarla por sus palabras.

Críticas a la ley

Rowling ha señalado públicamente a diez mujeres trans en las redes sociales, incluida la periodista y activista India Willoughby, y ha afirmado que "son hombres, todos y cada uno de ellos". Unas afirmaciones que han sido respaldadas por el primer ministro británico, Rishi Sunak, quien se ha mostrado muy crítico con la ley aprobada por el Gobierno del Partido Nacional Escocés (SNP; en sus siglas en inglés). "No se debe criminalizar a la gente por exponer simples hechos sobre biología. Creemos en el derecho a la libertad de expresión en este país y los conservadores siempre lo protegeremos", ha asegurado Sunak al ‘Daily Telegraph’.

La polémica alrededor de la ley, aprobada en 2021, ha provocado importantes retrasos en su implementación. Incluso algunos miembros del SNP han mostrado su preocupación por el riesgo de que limite la libertad de expresión. "Será utilizada como arma por los activistas de los derechos de los transexuales para intentar silenciar, y peor aún criminalizar, a las mujeres que no comparten sus creencias", aseguró a mediados de marzo la diputada nacionalista escocesa Joanna Cherry. Los detractores de la norma –que también castiga las amenazas por motivos de edad, discapacidad, religión y orientación sexual– han lamentado que no se incluyan las razones de sexo como motivo de discriminación.

Defensa del texto

El ministro principal de Escocia, Humza Yousaf, ha insistido en que los motivos de sexo no están incluidos en la ley porque el Gobierno pretende tramitar una norma específica para proteger a las mujeres. Una decisión respaldada por un grupo de trabajo independiente, que considera necesaria la aprobación de una ley exclusivamente contra la misoginia para acabar con el acoso y los delitos de odio a través de internet. 

Yousaf ha recalcado que la norma implementada este lunes garantiza el derecho a la libertad de expresión y ha asegurado que afirmaciones en contra de la autodeterminación de género no serán consideradas delitos de odio. El jefe del Gobierno escocés ha lamentado la “desinformación e imprecisión” sobre el impacto de la ley y ha criticado a sus rivales políticos por crear una imagen poco certera del propósito original del texto. 

A pesar de los intentos del Gobierno por acallar las críticas, todavía existen dudas sobre cómo se perseguirán los ataques contra la comunidad trans, especialmente los ataques lanzados por cuentas anónimas en las redes sociales. La Asociación de Superintendentes de la Policía Escocesa ha mostrado su preocupación por la carga de trabajo que supondrá para los agentes investigar todas las denuncias por delitos de este tipo y ha alertado de que el personal no ha recibido suficiente formación ni instrucciones sobre cómo actuar en un escenario tan complejo.