El empresario gallego Amancio Ortega logra vender por 76 millones su superyate Drizzle gracias a una empresa de Mallorca

Casi tres años después de hacerse cargo de la operación, la consultora y broker náutico Hamilton Marine, con sede en Palma, adjudica la exclusiva embarcación de recreo del magnate de la moda

El yate, por el que Amancio Ortega pagó 95 millones de euros en 2012, tiene 68,7 metros de eslora y acabados de auténtico lujo, con además de sala de cine y gimnasio

Imagen del yate Drizzle, que Amancio Ortega ha vendido por 76 millones gracias a la empresa mallorquina Hamilton Marine

Imagen del yate Drizzle, que Amancio Ortega ha vendido por 76 millones gracias a la empresa mallorquina Hamilton Marine / Hamilton Marine

Miguel Vicens

Miguel Vicens

Tres años después de poner su superyate Drizzle a la venta por 76 millones de euros, el empresario gallego Amancio Ortega, dueño del imperio de la moda Inditex, ha logrado culminar la operación y desprenderse del buque, por el que en su día pagó 95 millones de euros. Y lo ha hecho gracias a la intermediación de una empresa mallorquina, Hamilton Marine, consultora y broker náutico internacional con oficinas centrales en Palma que dirige Jonathan H. Syrett desde 2018, tras 30 años de experiencia profesional en Camper & Nicholsons.

El yate de Amancio Ortega fue construido por el astillero holandés Feadship en el año 2012 y actualizado en 2019. Tiene 68,7 metros de eslora y 11,20 de manga, con casco de acero y superestructura de aluminio que distribuye en su espacio de diseño clásico tres cubiertas con paseo completo alrededor de ellas y un puente, con comedor y sala de estar en popa en cada cubierta.

Popa del yate Drizzle que ha vendido Amancio Ortega gracias a la empresa Hamilton Marine

Popa del yate Drizzle que ha vendido Amancio Ortega gracias a la empresa Hamilton Marine / Hamilton Marine

El superyate, cuyo diseño interior y exterior corrió a cargo de De Voogt, tradicional compañía de arquitectos navales ahora asociada al astillero. puede acoger a diez personas en sus cinco camarotes, dos de ellos dobles con camas separadas, otros tres individuales y la suite principal.

Imagen de la popa del yate Drizzle

Imagen de la popa del yate Drizzle / Hamilton Marine

Un yate con acabados de lujos, cine y gimnasio

El barco, muy bien conservado, está dotado de un espacio para comidas en la zona inferior y en cubierta, salones con acabados de lujo y una pantalla de cine. Además, incluye una zona perfectamente acomodada para la tripulación que puede llegar a estar compuesta por 18 personas.

Además del gimnasio, los tres comedores y todo su equipamiento audiovisual, el Drizzle, cuanta con otros accesorios y equipamientos para el entretenimiento del pasaje: dos lanchas auxiliares, dos tablas de windsurf, dos pádel surf, dos kayaks, dos motos náuticas, equipos de esquí acuático y de buceo, una cama elástica y un tobogán autoportante. El buque tiene una autonomía considerable que le permite realizar travesías oceánicas: puede viajar sin repostar de España a Nueva York, donde la distancia náutica no llega a las 4.000 millas.