SEGURIDAD ALIMENTARIA

Sanidad defiende que se han seguido todos los protocolos de trazabilidad en las fresas contaminadas con hepatitis A

El ministerio responde así a las críticas del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, que ha exigido responsabilidades al Gobierno central

Mónica García

Mónica García / MINISTERIO DE SANIDAD

Nieves Salinas

El Ministerio de Sanidad ha defendido este miércoles su actuación ante la presencia de hepatitis A en una partida de fresas procedentes de Marruecos. Fuentes del departamento que dirige Mónica García han indicado a El Periódico de España, de Prensa Ibérica, que se han seguido los protocolos habituales y la trazabilidad del producto, que fue analizado por Sanidad Exterior tras detectarse la contaminación en un lote que llegó al Puerto de Algeciras (Cádiz). La prueba de que no ha existido ningún peligro está, han indicado, en que se ha detectado el producto contaminado y las fresas no han llegado a los supermercados.

El ministerio responde así a las críticas del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, que ha exigido responsabilidades al Gobierno central, por la entrada de una partida de 1.500 fresas con hepatitis A desde el Puerto de Algeciras (Cádiz). "Esas fresas no deberían haber llegado a España en ningún caso", ha aseverado.

Desde Sanidad indican que la partida fue detectada en el Puerto de Algeciras por funcionarios de Sanidad Exterior que, tras realizar los pertinentes análisis y detectar una pequeña partida de fruta contaminada, a su vez alertaron a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) que, por su parte, dio aviso a la Junta de Andalucía en cuanto tuvo conocimiento. Es decir, insiste el ministerio, se ha seguido toda la trazabilidad del producto como se hace habitualmente cuando se detecta un alimento en mal estado.

La Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEHH) también ha mostrado este miércoles su inquietud por la notificación emitida en el portal comunitario RASFF (Rapid Alert System Feed and Food, por sus siglas en inglés), que habla de un riesgo "serio". "¡Cuidado con la Hepatitis A!", advierte el presidente de los hepatólogos, el doctor Manuel Romero, que explica "cuando uno come un producto contaminado puede sufrir una hepatitis que puede ir desde una leve, que no genere ningún problema, hasta una hepatitis que pueda producir un fallo hepático y requerir un trasplante".

Consejo de los médicos

La Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEHH) también ha mostrado este miércoles su inquietud por la notificación emitida en el portal comunitario RASFF (Rapid Alert System Feed and Food, por sus siglas en inglés), que habla de un riesgo "serio". "¡Cuidado con la Hepatitis A!", advierte el presidente de los hepatólogos, el doctor Manuel Romero que, explica, "cuando uno come un producto contaminado puede sufrir una hepatitis que puede ir desde una leve, que no genere ningún problema, hasta una hepatitis que pueda producir un fallo hepático y requerir un trasplante".

Esta misma sociedad científica asegura que la hepatitis A es una enfermedad hepática infecciosa que se transmite principalmente por la ruta fecal-oral, ya sea por la ingestión de alimentos o agua contaminada o por contacto directo con un individuo infectado.

Los síntomas más habituales aparecen entre 2 y 6 semanas después de haber estado expuesto al virus

Los síntomas más habituales aparecen entre 2 y 6 semanas después de haber estado expuesto al virus y suelen ser: náuseas, vómitos, malestar general, orina oscura, heces pálidas y, el más característico, la ictericia (color amarillento de la piel), si bien la mayoría de los casos de hepatitis A no progresan a enfermedad crónica y se resuelven sin necesidad de tratamiento específico.

De todo a nada

"El virus de la hepatitis A es un virus ARN de transmisión fecal-oral que en áreas endémicas donde es prevalente y la población no está vacunada se transmite con mucha facilidad, a través de productos contaminados con restos fecales, especialmente crudos y sin cocinar", señala Manuel Romero, presidente de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH).

Y añade: "es una hepatitis de todo o nada, que puede derivar en hepatitis aguda grave con daño hepático fulminante, o puede curarse sin que apenas se note". Si se van a consumir productos de zonas endémicas, la AEEH recomienda la higiene de los alimentos, así como el lavado de manos con agua y jabón antes de ingerirlos.

La vacunación selectiva frente a la hepatitis A se realiza en España, precisan los hepatólogos, en los siguientes grupos de riesgo: enfermedad hepática crónica y alcoholismo crónico; trasplantados o en espera de trasplante; infección por VIH y riesgo de exposición (personas que se inyectan drogas, personas con conductas sexuales de riesgo -prostitución, hombres que tienen relaciones sexuales con hombres (HSH)-, y personas que viajan a zonas de alta endemia.