EL RESTAURANTE CERRÓ EN DICIEMBRE
Un franquiciado de McDonald's, "en la ruina" por un litigio con la cadena
Es el segundo caso de empresario 'rebelde' con la firma de comida rápida
Bartomeu Roig
Los restaurantes de comida rápida no paran de crecer en Castellón. Una de las cadenas principales es McDonald’s, con las recientes aperturas en las localidades de Burriana y Onda. Por eso llama la atención que haya un local en la provincia actualmente cerrado.
Es el situado en las inmediaciones de la avenida del Mar de Castellón, que cuenta a su alrededor con un hipermercado, dos supermercados de grandes dimensiones y varios negocios de restauración. Algunos carteles señalan que este McDonald’s está de reformas "para que disfrutes de una nueva experiencia", pero no se observa ningún movimiento de trabajadores. Solo un espacio vacío.
Discrepancias
El cierre tiene que ver con las discrepancias que arrastran el franquiciado y la propia McDonald’s. Un asunto que llegó a los juzgados, y que ha supuesto el final del contrato que mantenían desde hace 20 años la compañía Restaurantes McDonald’s SAU con Servicios de Restauración Da Costa SL.
Los motivos del enfrentamiento entre la cadena de origen norteamericano y el franquiciado rebelde no son desconocidos en Castellón. Recuerdan mucho a lo ocurrido en Vinaròs años atrás.
Condiciones
Para tener un restaurante de esta cadena hay que abonar una serie de costes de franquicia, pero Restauración Da Costa se enfrentó, al negarse a abonar facturas que consideran "por conceptos ajenos al contrato". La corporación contrata los servicios de otra empresa, Havi, que es el operador logístico. «En lugar de asumir los costos derivados de estos servicios, la corporación ha desviado la responsabilidad de pago hacia el franquiciado», apuntan. El importe de las facturas alcanzó los 800.000 euros.
Sentencias
En el 2021 hubo una sentencia que dio la razón parcialmente al franquiciado. «La jueza solicitó a McDonald’s que presentara el contrato por el cual Da Costa aceptaba abonar sumas que no había acordado previamente. La jueza determinó que, si no se le permitía examinar dicho contrato, McDonald’s debía reembolsar todas las cantidades desviadas al franquiciado», indican desde esta parte.
El recurso presentado por la representación legal de la multinacional cambió el panorama. El pasado octubre, la Audiencia Provincial de Castellón dio la razón a McDonald’s, con una condena de casi cuatro millones de euros (los 800.000 euros más intereses acumulados), algo que ha dejado a este franquiciado «en una situación de ruina económica», afirman. No están de acuerdo con este fallo, por lo que anuncian la próxima presentación de un recurso al Tribunal Supremo.
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