Rafa Nadal y Mery Perelló quieren disfrutar de una boda en intimidad. Es por esto que los invitados [vea aquí las imágenes, cuando suben a los autocares que les conducirán a la Fortalesa, se encuentran con una nota que dice: “Os recordamos que nos gustaría que disfrutarais de nuestra boda y que fuera en la más estricta intimidad. Cuando lleguéis encontraréis un casillero para que podéis dejar los móviles. Muchas gracias: Maria Francisca y Rafael”.
De este modo tanto los novios como la familia y amigos podrán relajarse y pasar una jornada inolvidable sin estar pendiente de que alguno de los allí presentes tenga la tentación de llevarse un recuerdo gráfico del acontecimiento .
Las personas que van a trabajar en el evento tampoco pueden llevar consigo sus móviles y pueden ser sometidos a algún tipo de registro para evitar que alguien pueda tomar alguna imagen del evento. Los novios no han querido dejar ningún cabo suelto para garantizar la privacidad de su boda.
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