Hasta hace aproximadamente un lustro no era habitual encontrar en las tiendas gourmet de Palma estanterías o aparadores con una amplia selección del producto estrella de la dieta mediterránea: el aceite. Una tendencia que se ha corregido: los establecimientos con productos selectos de la isla -un tipo de comercio que ha crecido en los últimos dos años- incrementan su oferta de aceites "debido a una demanda cada vez más elevada que responde tanto a las necesidades de consumo interno como a la costumbre de los turistas de regresar a casa con un souvenir saludable, típico y a la vez atractivo", comenta María José Cano, encargada del Club del Gourmet de El Corte Inglés de Avenidas.

La introducción paulatina del oro líquido en estas tiendas (entre ellas La Mirona de Sant Jaume o la Aceitunera Jiennense en la calle Cotlliure) ha coincidido en el tiempo con la recuperación de la producción artesanal y la comercialización de este producto en la isla, "que tuvo lugar hace 22 años, y el paulatino trabajo que se ha ido desarrollando desde la DO durante la última década. Los grandes cocineros de la isla también han ayudado a difundir nuestro aceite", asegura Josep Oliver, presidente de la DO Oli de Mallorca. A partir de los grandes estándares de calidad conseguidos desde hace una década por Aubocassa de Manacor, pioneros en la recuperación, el resto de productores isleños percibieron que el listón estaba alto y que para competir había que, no sólo cuidar al cien por cien el producto, sino presentarlo cada vez mejor. Tanto es así que el diseño de algunas de estas botellas recuerdan a perfumes. Es el caso, por ejemplo, del aceite ecológico Es Verger (Esporles). El envase de un litro (alcanza los 50 € y se puede encontrar en D´Origen en el Olivar) evoca forzosamente al icónico frasco de Chanel nº5.

Oro líquido premiado

En Las Gracias (calle Santa Eulàlia, 13), uno de los establecimientos gourmet mejor cuidados de Palma gracias al buen gusto de sus dueñas, las hermanas Marta y Laura Calvo, ofrecen una selección de aceites en función de la calidad, la exclusividad y el aprecio personal hacia el productor, "un detalle que también es muy importante porque el cliente también valora que le expliques detalles y le des información de primera mano de los productos", considera Marta. En la tienda ofrecen los aceites Solivellas (también los macerados), de Pep y Sebastià, elaborados en Alcúdia. Y el oro líquido del sur de España por excelencia, el Castillo de Canena, de Jaén. "Es uno de los mejores y no se encuentra casi en ningún sitio. La semana pasada recibieron en la Olive Oil Japan una mención especial por su Gran Reserva Familiar. Y en la Flos Olei de 2014, una guía de referencia mundial editada por dos catadores italianos profesionales, le puntuaron con 98 puntos sobre 100 posibles", refiere Calvo. "Es un aceite con una mezcla de sabores increíble que en boca es fresco, sabe como a hierba. Los aceites mallorquines son más suaves por las condiciones climatológicas. El de Castillo de Canena [también disponible en El Corte Inglés] suele buscarlo un público nacional seleccionado. Los turistas no lo aprecian tanto", agrega Marta. Además de su calidad, el embotellado es otro de sus fuertes: "A los chicos les suele gustar la de color cereza, diseñada este año por Fernando Alonso [cada año se le ofrece a una personalidad distinta], un envase de una edición limitada que contiene el aceite extraído del primer día de cosecha", comenta. "En cambio, a las mujeres les llama la atención la de azul celeste, que contiene el zumo de la aceituna arbequina al humo de roble", agrega. En su tienda también puede encontrarse el Moix, de la zona de Valldemossa y Sóller, "envasado en lata [como el Jornets de Sencelles, disponible también en botella, muy valorado por los alemanes y sus publicaciones gastronómicas], un formato por el que muchos turistas optan porque lo encuentran más seguro para transportarlo en la maleta", apunta. "Cada lata la hacen una a una con una plancha y por eso cada envase es un poquito diferente, un hecho que la hace más exclusiva y especial", señala.

Calvo confirma el boom y la moda de los aceites gourmet a partir de un dato significativo. "Cada semana viene al menos un productor a la tienda a ofrecerme aceites, pero hay que seleccionar", sostiene. "Creo que uno de los motivos de este auge es que la crisis ha traído como consecuencia una tendencia: aprovechar más y mejor los recursos naturales. De ahí que se haya recuperado en la isla el milenario cultivo de la aceituna". En Las Gracias le dan a probar al cliente el aceite si así lo desea. "Lo más fácil es con una cucharilla, pero también lo hacemos con una galleta Gori de Muro y un poco de Flor de Sal encima".

La encargada del espacio Gourmet de El Corte Inglés especifica que todos estos oros líquidos de alta gama son de primera presión en frío. Los precios del envase de medio litro: entre 12 y 20 €, aproximadamente. "Los de la marca Corte Inglés son más baratos, 7,95", detalla. "Aquí tenemos las principales denominaciones de origen españolas: la de Mallorca, del Empordà, de Extremadura, de Navarra o de Jaén, etc", enumera. "Estos aceites suelen embotellarse con cristal oscuro para proteger los de la luz", comenta María José Cano, quien muestra el amplio recodo que ocupa el oro líquido en el Club del Gourmet, una suerte de oleoteca muy completa. "Tenemos el zumo de las diferentes variedades de aceitunas: picual, arbequina, hojiblanca, mallorquina o empeltre, picudo, cornicabra u ocal, cada una de ellas con su sabor, color y demás características", explica. Además de catas y concursos de pa amb oli, lo último que ha llegado a los grandes almacenes es el caviar de aceite. Para menús súper gourmets.