­El filólogo, medievalista y académico Martín de Riquer (Barcelona, 1914) falleció ayer a los 99 años de edad en Barcelona.

Erudito y gran experto de El Quijote, Martín de Riquer era una autoridad mundial en historia medieval y en la narrativa caballeresca europea.

Martín de Riquer inició su carrera humanista en la facultad de Letras de la Universidad de Barcelona, recibió el Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 1997 y en su trayectoria destaca haber sido profesor del Rey Juan Carlos en los años 60, cuando éste era aún Príncipe.

Conde de Casa Dávalos desde 1957, era un especialista en literatura medieval y académico de la Lengua

Catedrático jubilado hace muchos años impartió clases de su licenciatura, Filología Románica (Universidad de Barcelona) y doctorado (Universidad de Madrid).

Empezó su actividad docente en 1942 en la Facultad de Letras de Barcelona y en 1950 ganó la Cátedra de Historia de las Literaturas Románicas.

Miembro de la Real Academia de las Buenas Letras de Barcelona desde 1944, presidió esta institución entre 1962 y 1996.

Estudioso de El Quijote, la heráldica y los trovadores, también se dedicó a investigar la novela de Joanot Martorell, Tirant lo Blanc, con cuatro ediciones en catalá, tres más de su traducción castellana del siglo XV y el libro Aproximación al Tirant lo Blanc (1990), que le valió el Premio Nacional de Ensayo. Su última aparición pública tuvo lugar en marzo de 2008 en el Palau de la Música en la presentación de su biografía, obra de Cristina Gatell y Gloria Soler, con la que ganaron el Premio Gaziel.