La última mala noticia para los aficionados al mundo del toro isleño llegaba el pasado miércoles, cuando se anunciaba la cancelación del concurso de recortadores que debía celebrarse ayer viernes en el Coliseo Balear. Una estocada más a una Fiesta de la que en este último verano sólo se han celebrado en Mallorca un par de corridas. "La verdad es que no me lo explico. He sido testigo de esos años en los que había hasta 30 festejos en Palma. No sé cómo hemos podido caer tan bajo", se cuestiona Bartomeu Coll, crítico taurino de DIARIO de MALLORCA. Al igual que este periodista y escritor, gerentes de las plazas insulares, empresarios del sector y aficionados analizan junto a este periódico las causas de esa caída en picado de asistencia a las corridas. De no cambiar la tendencia, aseguran que se estarían preparando para el último capotazo.

10 de agosto. Paquirri, ´El Fandi´ y Padilla. Cartel de primer nivel para la única corrida de este 2012 en Palma. "Desgraciadamente, no se consiguió ni media entrada en la plaza", cuenta Damián Ferrà, del Coliseo Balear. "Económicamente, la gente no puede pagar 40 o 50 euros de un billete. Sí lo hacen con el fútbol, pero claro, allí pueden ir los niños... es una merma muy importante para nosotros que los padres no puedan llevar a sus hijos a la Fiesta. ¿Cómo vamos a crear afición?", se pregunta. En la misma línea se expresa Tomeu Llobera, gerente del redondel de Inca. "Es cierto que cuando organizamos un festejo sí solemos reunir a unas cinco mil personas, pero eso es una vez al año y en este 2012 ni eso; por problemas burocráticos no pudimos organizar nuestra tradicional corrida... un desastre. También creo que en Mallorca cada vez hay más antitaurinos y que la crisis nos ayuda muy poco a sobrevivir", explica a este diario.

La subida del IVA de las corridas de toros -que se incrementará en tres puntos, del 18% que se estaba aplicando hasta este momento al 21% que se aplicará a partir del próximo 1 de septiembre,- de las novilladas y los espectáculos de rejoneo -del 8% al 21%-, dificultará aún más a los empresarios la organización de los mismos. "El futuro es incierto no solo en la isla, sino en toda la península", aclara Julian Alonso, gerente de Funciones Taurinas. Según el responsable de esta empresa de eventos taurinos, "la falta de público" es un hecho "que no podemos ignorar". "Es un síntoma generalizado: cada vez hay menos afición y no sé si esto tendrá solución con los años. Me gustaría ser positivo", confiesa. Lo que sí se atreve a aventurar es que el próximo 2013 habrá toros en la isla. "Haremos el máximo esfuerzo para garantizar al menos un festejo. Ojalá podamos ir más allá", incide Alonso. Parece toda una épica en un sector en el que, según algunos taurinos de la isla, hay cierta desidia empresarial. "Lo entiendo en cierto modo. Si yo fuera empresario y viera que no gano un duro me dedicaría a otra cosa", razona Ferrà.

Desde Toropasión Espectáculos, responsables del concurso de recortadores que había de celebrarse ayer en Palma, van más allá. "Claro que falta algo de ayuda institucional. No se entiende que pongan tantas trabas", resalta Carlos Bernabéu, su responsable de comunicación. Su lamento se entiende un poco más al conocer que el evento previsto para el viernes no pudo celebrarse "porque el reglamento contempla permisos para novilladas, rejoneos y corridas pero no para recortadores. Francamente, que un espectáculo para todos los públicos en el que participa el toro pero no se vierte ni una gota de sangre, no tenga autorización suena casi a broma", sentencia.

Muro y Alcúdia son plazas también con gran tradición taurina, aunque éstas, al depender de los ayuntamientos, cuentan con una serie de subvenciones que facilitan la celebración de festejos. Eso sí, tal y como denuncian desde Anima Naturalis, "acuden muchos menores a las corridas y los consistorios acaban pagando las multas. Esto acabará pasando factura. Se lo pensarán más a la hora de montar estos eventos".

Así se expresa Guillermo Amengual, representante en la isla de la organización que defiende los derechos de los animales. "Poco a poco va calando en la sociedad que la Fiesta es un espectáculo lamentable en el que el astado sufre un daño y una muerte deplorables". Y va más allá. "Creo que la tauromaquia en Mallorca está convaleciente... y aquellos que digan que aún tiene futuro mienten", subraya. Eso sí, lamenta la decisión del Gobierno de autorizar la retransmisión de corridas de toros en horario infantil en RTVE. "Emprenderemos nuevas campañas porque la vuelta a televisión de los toros es, claramente, un paso atrás en nuestras reivindicaciones".

¿Qué alternativas le quedarán entonces a los propietarios de las plazas para rentabilizar el espacio? "Está claro que los conciertos y otro tipos de shows nos dan la vida", reconoce Llobera. También desde el Coliseo Balear comparten opinión. "Cada vez se harán más espectáculos musicales y menos corridas". "Yo solo espero que la plaza de toros de Palma no se convierta en un Coliseo romano, solo para que la visiten turistas", concluye Coll.