En declaraciones a los medios informativos en Mercabilbao, el alcalde bilbaíno, del PNV, ha tachado de "ladrón" al ya ex director financiero del Guggenheim, Roberto Cearsolo, del que ha reconocido que "manejaba todo el tinglado de las cuentas" de este museo, lo que impidió que las auditorías destaparan las supuestas irregularidades.

"A los ladrones hay que desenmascararles y quitarles de en medio, pero no se puede ahora hacer una tragedia del museo Gugenheim, porque sigue siendo un elemento extraordinario para el desarrollo de Bilbao. O sea: que entre unos y otros no la fastidiemos ahora, fastidiando al Guggenheim, porque un chorizo se ha llevado un dinero", ha emplazado.

Azkuna ha dicho que es posible que, tras lo sucedido, algunos partidos políticos critiquen que las cuentas del museo deberían haber sido fiscalizadas, pero ha recordado que "ha habido auditorías" sobre la situación económica de esta entidad, que han sido realizadas por el propio Tribunal Vasco de Cuentas Públicas.

No obstante, ha afirmado que los informes no descubrieron este agujero porque Cearsolo daba a los organismos auditores "los papeles que le interesaban".

"Claro, chorizo era, pero tonto no. Y afortunadamente ha ocurrido una cosa, que se ha puesto enfermo -Cearsolo estuvo de baja a comienzos de abril-, porque igual de otra forma no lo cogen", ha incidido.

Azkuna ha defendido que deben ponerse en marcha sistemas para evitar desfalcos, pero ha considerado que este tipo de actuaciones fraudulentas en la gestión de empresas han existido siempre -"desde Adán y Eva hasta ahora", ha dicho-, y ha recalcado que continuarán existiendo "por muchos controles que pongamos".

"Yo en mi vida política y como ciudadano he visto muchos problemas y muchos desfalcos. Pero en la vida hay que saber quitar de en medio a esa gente y que la empresa, la promoción y sobre todo una cosa tan buena como ha sido el Guggenheim vayan hacia adelante", ha declarado tras incidir en la importancia que ha tenido el museo para Euskadi.

Azkuna ha explicado que informó ayer a la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Bilbao de los detalles que conoce sobre el presunto desfalco.

También ha apreciado la "transparencia" y "celeridad" con la que el director general del museo, Juan Ignacio Vidarte, ha respondido hasta ahora sobre lo sucedido, aunque más tarde dé también cuenta de este tema al Parlamento vasco.