El Patronato de la Fundació Teatre Principal aprobó ayer pedir al Pleno del Consell una aportación extraordinaria de 736.826,69 euros para cubrir una serie de "desviaciones presupuestarias detectadas" en el presente ejercicio. Es la única vía para evitar "medidas drásticas" que, en el peor de los casos, contemplan el cierre del teatro, alertaron el vicepresidente y conseller de Cultura, Francesc Miralles, y el director insular Rafel M. Creus.

Ante la "herencia recibida" por el anterior equipo directivo, un "desajuste tanto en los gastos como en los ingresos" que pone en jaque al actual "nivel de programación del teatro" y que responde a una "mala gestión" y una "descoordinación", el Patronato también ha acordado una auditoría económica y de gestión para el Principal con el fin de mejorar la organización interna y que "esto no vuelva a ocurrir". El paquete de medidas urgentes se trasladará al Pleno del próximo 8 de octubre.

"El Teatre Principal requiere mà de metge y tenemos que repensar el modelo que queremos para las artes escénicas. No nos podemos permitir todo esto", espetó Miralles en referencia a que en ocho meses el PP se haya gastado todo el presupuesto de 2015.

A día de hoy se sabe que los gastos finales del Teatre Principal a 31 de diciembre de 2015 serán mayores de los presupuestados inicialmente (4.455.404 euros frente a 3.959.533 euros), con lo que se prevé una desviación de 495.870 euros al alza. Por su parte, los ingresos serán inferiores a los presupuestados (3.718,577 euros frente a los 3.959.533 iniciales), con una reducción de 240.956 euros.

"La previsión inicial de ingresos y gastos era irreal", lamentó Miralles. "Si queremos mantener el Principal abierto tenemos que solicitar al Consell una aportación de carácter extraordinario y grave, que asciende a más de 736.000 euros, y que representa un 18 por ciento del presupuesto del que dispone el Teatre", subrayó el conseller de Cultura.

"Asumimos el compromiso de responsabilidad para que esto no vuelva a suceder. No nos podemos permitir gastos desorbitados por una mala gestión, mala coordinación y mala gerencia al frente del Principal. Por eso hemos de dar un paso adelante y pedimos una auditoría económica y de gestión", agregó.

El capítulo de programación de actividades y representaciones es el más grave en cuanto a desajustes en las previsiones de gastos iniciales. En este sentido, el director gerente en funciones del Principal, Rafel M. Creus, explicó que en lo que se refiere a la programación de septiembre a diciembre "lo único que hemos hecho es reducir costes".

"Me dejaron una programación apalabrada pero no cerrada que afectaba sobre todo a obras de teatro y danza de compañías mallorquinas. Lo más fácil hubiera sido parar la programación, pero no. Lo que decidí es optar por presupuestos más modestos en dos espectáculos, el de Antología de la zarzuela y una velada de ballet en noviembre, que han significado un ahorro de más de 100.000 euros".

Miralles insistió en que estamos ante una "falta de profesionalidad, previsión y respeto en el uso de dinero público. Esperamos que el Consell pueda asumir esta partida extraordinaria".