Solo o en pareja. Con amigos o familia. Son muchas la manera de disfrutar como aficionado al fútbol en un estadio. Una posibilidad que la pandemia del covid ha arrancado de cuajo del corazón de miles de aficionados por todo el globo. Y Son Moix no es ajeno a ello. Gradas vacías, únicamente animadas con los gritos de los propios futbolistas en el terreno de juego sin el ingrediente especial y esencial que añaden los seguidores. Son muchos los socios del Mallorca que hablan de tristeza, frustración y rabia al no poder acudir a su «casa», siempre respetando las medidas establecidas para frenar la expansión del virus, especialmente en un año en que el conjunto mallorquinista lidera la clasificación de Segunda División.

«Si estuviésemos en el campo habríamos ganado más partidos todavía», afirma Pau Ribba, socio 2.832 del Mallorca. Como él, son muchos los seguidores que echan de menos no poder aportar su grano de arena desde la grada a los de Luis García. «Lo llevo muy mal, es muy triste no poder ir a Son Moix y disfrutar de este Mallorca. Los días de partidos estaba ansioso por ir al campo, con la camiseta ya puesta desde por la mañana», lamenta, a la vez que añade que lo que más echa de menos es poder agradecer el esfuerzo de los jugadores. «Hay partidos que no se han merecido perder o no han jugado bien y me hubiese gustado estar allí para agradecérselo porque de verdad se lo merecen», apunta.

La resignación y la nostalgia por los tiempos de poder ir al estadio a disfrutar del ambiente son la nota predominante entre los aficionados bermellones consultados por este diario. Es el caso de Pep Penya, socio durante más de 35 años y que este año no ha renovado debido al contexto actual. «Me ha bajado la moral no poder ir al campo. Antes no podía estar un domingo sin fútbol y ahora, después de tantos meses, casi me da igual», explica resignado.

A falta de poco menos de tres semanas para que se cumpla un año desde el último partido con público en Son Moix – 1 de marzo con derrota ante el Getafe por 0-1–, la evolución de la pandemia y las medidas establecidas por LaLiga dejan claro que este curso no se abrirán los estadios salvo giro radical de los acontecimientos. Unas normas que todos comparten y que aseguran que son mucho más importantes que el fútbol en sí. «Entiendo que las circunstancias sanitarias obligan a esta situación, pero no ello no quita que sea muy complicado no poder estar disfrutando de la temporada que están haciendo. Es doloroso no poder ir a un partidazo como el que tenemos este domingo contra el Espanyol de Moreno», destaca Marc López, socio 6.002 del Mallorca.

En su misma línea se pronuncia Sebastià Oliver, presidente del Moviment Mallorquinista. «Tenemos que seguir hacia adelante con las medidas. Ya nos gustaría poder estar todos en el estadio, y más así como va el equipo en Liga», comenta. «Nos da mucha rabia no poder ir al campo, pero primero va la salud y comprendo que con la pandemia no se puede», añade Toni Company.

«Antes no podía estar un domingo sin fútbol y ahora, después de tanto, casi me da igual»

Pep Penya - Aficionado del Mallorca

Más allá del partido, son muchos los que añoran tanto las horas previas como las posteriores al encuentro. La reunión con los amigos antes del choque, las charlas para comentar el partido o simplemente disfrutar del día. «Desde siempre he sido muy futbolera y el rato que teníamos de ir al campo para poder ver al Mallorca ya no está. Lo vivimos, nos gusta mucho y duele no tenerlo», resalta Laura Torrandell, socia los últimos años.

«Un triunfo del Mallorca, y creo que hablo en nombre de muchos aficionados, suponía que ese domingo que habías vivido en el estadio era un día feliz», reconoce López. «Las dos horas de partido son divertidas, pero el día en sí lo es más. Echo de menos vivir el partido con la gente…», valora Javi Guijarro, socio bermellón.

Pep Lladó, más conocido como ‘es Berro’, señala que celebrar goles «como los últimos que ha marcado el Mallorca» es de las cosas que más echa en falta. «En casa no es lo mismo. Ir al campo es la esencia del fútbol. Allí lo hubiésemos celebrado tirándonos unos encima de otros, riendo y comentando, sobre todo con mis compañeros de la peña», destaca.

Respeto y crítica hacia Moreno

El partido de este domingo ante el Espanyol, con el esperado regreso de Vicente Moreno, ha copado las redes sociales de un intenso debate sobre el técnico valenciano. Hay división de opiniones en cuanto al recibimiento que le brindarían, ya que si bien «agradecen» sus servicios, no comparten su modos al marcharse del club.

«Le aplaudiría hasta que el árbitro hiciese sonar el silbato. Ser agradecido no cuesta nada y por estas tres temporadas creo que lo tenemos que hacer», explica Toni Vallespir, presidente de la Unió de Penyes Mallorquinistes. «Es uno de los entrenadores que más alegrías ha dado a la afición mallorquinista. Este domingo pasaría del tema y disfrutaría de ver al Mallorca», comparte Toni Guasp, socio durante nueve años. «Basta fijarse en cómo está el Deportivo en Segunda B. Lo que hizo fue muy importante para el Mallorca. Le aplaudiría, porque la vida sigue y las cosas cambian», añade Ribba.

«Moreno fue un buen entrenador, pero se fue de malos modos y quedó mal de cara a los aficionados»

Toni Company - Socio del Mallorca

Otros, en cambio, no olvidan su salida del club tras el descenso. «Fue un buen entrenador para el Mallorca, pero se fue de malos modos y quedó mal de cara a los aficionados», critica Company. «No le aplaudiría. Hizo un gran trabajo aquí y cobró por ello, pero se fue muy mal», añade Oliver. «Ha hecho un montón por nosotros y le estaré eternamente agradecido, pero los caballeros saben irse. No dejó bien el club y se lo recriminaría», zanja Guijarro.

Los aficionados del Mallorca anhelan el momento de poder reencontrarse con los suyos en las gradas de Son Moix, aunque lo que pueda pasar deportivamente de aquí a pocos meses, siempre dependiendo de la pandemia, también les preocupa. «Siempre pienso en que me va a fastidiar mucho si el Mallorca asciende, que creo que lo hará, y no poder ir a celebrarlo a Tortugas», concluye López.