Con sufrimiento, pero de forma merecida. El Mallorca ha conseguido su segunda victoria del curso gracias a un gol de Castro antes del primer cuarto de hora y al gran trabajo colectivo de todo el equipo ante un Rayo Majadahonda que hizo méritos para lograr al menos el empate. Esta victoria permite a los de Moreno situarse como el único equipo, junto al Málaga, que ha ganado los dos partidos disputados.

El Mallorca ha sacado máximo rendimiento al gol de Castro en el minuto 13, una diana de delantero nato, que ha aprovechado a la perfección un buen centro de Abdón. Ha sido un triunfo sufrido, trabajado hasta la extenuación, porque el Rayo Majadahonda, en principio un equipo condenado a luchar hasta la última jornada por evitar el descenso -aunque en esta categoría loca los pronósticos tienden a no cumplirse nunca- ha demostrado ser un buen equipo, aseado, que la toca y que sabe a lo que juega. Pero enfrente se ha encontrado un Mallorca ordenado, con las ideas muy claras, que solo ha sufrido al contragolpe.

En un escenario de película desconocido para ambos equipos, han empezado nerviosos los dos, más el Mallorca, al que el balón le duraba un par de segundos. Esto ha puesto nervioso a Moreno, que no se ha cansado de pedir a sus jugadores, con ostensibles gestos, que la tocaran y tocaran hasta el hartazgo. Y de la nada llegó el gol de Castro. Abdón ha recibido un balón en profundidad, lo ha pasado Castro y el delantero asturiano se ha inventado un gol de delantero de área, de pillo. Para eso se le ha fichado. El balón le ha caído del cielo, se la ha colocado en su pierna buena, la derecha, y ha batido a Basilio.

Antes del primer cuarto de hora el Mallorca estaba donde quería, con ventaja en el marcador. Pero ha sufrido de lo lindo para mantener la ventaja. Siete minutos después del gol, Aitor García, el mejor jugador del partido y un tormento para toda la defensa rojilla, en especial para Fran Gámez, estrelló el balón en el larguero con Reina batido. Ha sido un primer aviso de lo que le esperaba al Mallorca. El equipo de Iriondo no estaba dispuesto a morir, y si lo hacía sería con las botas puestas. El mismo jugador, cedido por el Cádiz, ha ganado la espalda a la defensa rojilla cinco minutos después. Se ha plantado solo ante Reina, pero su disparo ha sido un regalo para el guardameta del Mallorca. Sin tregua, Raíllo se ha adelantado a Fede Varela cuando este se disponía a marcar.

Y ha llegado a la media hora el agua bendita. Con un calor asfixiante, el árbitro ha detenido tres minutos el partido para que los jugadores se hidrataran. Este parón se ha convertido como una especie de tiempo muerto en el baloncesto, donde los entrenadores dan instrucciones a sus jugadores. Moreno ha dado muchas en este receso de tres minutos porque no le gustaba nada de lo que estaba viendo. El equipo iba por delante en el marcador, pero nadie hubiera calificado de injusto un empate o, incluso, una victoria de los locales en esta primera media hora.

El parón ha ido bien porque el Mallorca ha espabilado. En las botas de Castro primero y de Aridai después ha tenido la oportunidad de abrir brecha en el marcador, pero en ambas el portero de Rayo se ha lucido con dos paradones. También la ha tenido el equipo madrileño cuando Iza ha rematado fuera, solo, un gran centro cruzado del de siempre, Aitor García.

La segunda parte ha sido muy similar a la primera. Dominio del Rayo, pero con reparto de ocasiones, dos para cada equipo. Posiblemente intuyendo un acoso y derribo de los locales, Moreno sustituyó a Castro por Dani Rodríguez a los diez minutos, un cambio que pareció sorprender al goleador. Rodríguez se ubicó como segunda punta pero con funciones de refuerzo del centro del campo. En el minuto 50 Reina ha realizado la primera parada del partido, a la que le siguió otra un minuto después en un cabezazo a bocajarro de Martínez, completamente solo. Tres minutos después ha podido sentenciar Abdón, pero su violento zurdazo se ha estrellado en el poste.

En los úlimos minutos el equipo ha sabido sufrir y el Mallorca es colíder con el Málaga, los dos únicos equipos que han ganado los dos partidos disputados. Mejor inicio imposible.