El Mallorca B sigue soltando lastre. Tras la cesión de Sarmiento (Gavà) y Benji Machini (Barakaldo), les toca turno a Mateu Ferrer Cabrer y a Eder González Tortella, aunque son dos operaciones muy diferentes.

Eder González, prometedor delantero del División de Honor juvenil, irá cedido al Cornellà, equipo que juega en el mismo grupo que el Mallorca B en la categoría de bronce. En el caso de Mateu Ferrer, se ha desvinculado definitivamente del filial rojillo, que hace semanas ya le comunicó que no contaba con él. Su destino será el Pontevedra, equipo que la pasada campaña acabó octavo en el grupo 1 de la Segunda División B y con el que se ha comprometido por espacio de una temporada.

De esta forma, se pone punto y final al 'culebrón' del que fue la pasada temporada uno de los goleadores del fútbol nacional (28 goles en 31 partidos) y al que su elevada edad para jugar en un filial -el 7 de noviembre cumplirá 26 años- le cerró el salto al primer equipo del Real Mallorca.

Ferrer renovó de forma automática al superar los 25 partidos jugados la pasada campaña según rezaba su contrato. Pero, con la llegada del nuevo director deportivo, se cambió el criterio de composición del plantel, descartando la presencia de jugadores por encima de la edad sub' 23.

Un requisito que no cumplían ni Álvaro de Dios -también descartado- ni el propio Mateu Ferrer, que recala en un histórico del fútbol español, un Pontevedra que contabiliza seis temporadas en Primera División. El objetivo de los gallegos es regresar a la categoría de Plata.