Tradicionalmente Tots Sants marca el sus a la temporada de matanzas, una tradición que se verá alterada por las altas temperaturas inusuales en esta época de año. De hecho, la mayoría han optado por esperar a que el termómetro baje por miedo a que un lugar inadecuado de conservación de los productos que se obtienen con las matanzas como la sobrasada implique perder la producción y, en consecuencia, la provisión para llenar la despensa. Así lo aseguran varios de los expertos consultados que aseguran que de momento «todo está muy tranquilo».

«La gente va a esperar a que el tiempo refresque para no arriesgarse a que la sobrasada se vuelva mala con estas elevadas temperaturas», así lo cuenta Margalida Obrador, gerente de Ramaders Agrupats que asegura que «si la sobrasada no tiene la temperatura adecuada, puede ocurrir que la fermentación no vaya así como toca y se vuelva mala». «La gente espera que bajen las temperaturas, ahora mismo el tema de las matanzas está muy tranquilo. Es verdad que Tots Sants marca el sus pero todo dependerá del tiempo y que baje el termómetro», admite Obrador.

Y es que «si la gente no tiene un sitio adecuado y fresco para guardar los productos propios de las matanzas, no se querrá arriesgar con estas altas temperaturas tan inusuales en esta época del año», mantiene Obrador que asegura que siempre hay gente fija o que ya tiene contratado el matancer para tal fecha y las hará igualmente pero toda aquella gente que compra la carne para hacer la sobrasada esperará a que refresque un poco más.

En la misma línea se postula Damià Nicolau de Can Not. «El tema de las matanzas se ha retrasado mucho por las elevadas temperaturas, la gente no ha arrancado. En octubre había gente que ya hacía matanzas. Esperan a que el tiempo cambie porque realmente con estas temperaturas no hace ganas comerte un botifarrón». Normalmente, explica Damià Nicolau, en octubre la maquinaria se ponía en marcha pero este año todo está muy tranquilo.

La campaña de matanzas se retrasa a la espera de que bajen las temperaturas R.F.

Joan Sunyer de Cárnicas Sunyer deja claro que lo que marca el sus de la temporada de matanzas es el frío pese a que haya gente «fija» en el calendario y no mire el tiempo pero es un mínimo de gente que lo hace así.

«Es que el sentido de las matanzas era hacerlas cuando hacía frío y no peligraba que la carne se pusiera mala. Con estas temperaturas tan elevadas, uno no se quiere arriesgar. De todas maneras, habrá un momento que si sigue el calor, la gente las hará por tradición pero ya hablamos de finales de noviembre o principios de diciembre».

Te puede interesar:

Precisamente, con motivo de la proximidad de la campaña de matanzas domiciliarias de cerdos, que oficialmente empieza el uno de noviembre, y con el fin de ofrecer información «extensa, clara y accesible», la dirección general de Salud Pública y Participación ha actualizado la página web con contenidos específicos dirigidos tanto a los ayuntamientos, instituciones competentes en la organización de las matanzas, como a los ciudadanos particulares.

«Este año no todo el mundo podrá hacer matanzas con ‘tap de cortí’

El tap de cortí da un sabor excelente a la sobrasada pero Damià Nicolau de la empresa porrerenca de Can Not avisa que esta campaña será un 50% menor en comparación con el año pasado que llegaron a las 18 toneladas. 

Las elevadas temperaturas del verano y las sucesivas olas de calor también han afectado a la producción de pebre bord. «Básicamente este año la producción de cualquier tipo de pimiento ha sido mucho menor en cantidad de kilos y también en el tamaño de los pimientos», desgrana Damià Nicolau.

«Por mucha agua que uno le de, el pimiento se ha resentido con las elevadas temperaturas que se han registrado este verano. Se ha producido mucho menos», razona Nicolau desde Can Not que deja claro que este año «no todo el mundo podrá hacer las matanzas con tap de cortí porque cuando se haya terminado, se habrá terminado». 

De hecho, asegura que «entre nosotros y Especias Crespi [los mayores productores] habrá un 50% de tap de cortí menos que el año pasado». 

Así, las cosas la campaña de matanzas estará marcada este año por el retraso debido a las altas temperaturas inusuales en un mes de noviembre y por una menor producción de tap de cortí, también debido a las elevadas temperaturas.