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La oposición de Son Servera reprueba al concejal Ramon Reus

La alcaldesa asumirá la gestión del polideportivo y, así, se retira el punto que debatía la dimisión del edil

La alcaldesa de Son Servera, Natalia Troya.

El ayuntamiento de Son Servera celebró ayer el pleno extraordinario, solicitado por la oposición, para debatir la desaprobación del regidor de Deportes, Comercio y Patrimonio, Ramon Reus. Los hechos del debate se centraron en tres puntos. Uno era la participación del edil en una comida en un restaurante, el día de Nochevieja a la que tuvo que acudir la policía por denuncias vecinales de que en el local no se cumplía la normativa sanitaria vigente. Otro punto era la instalación de una caseta donde se daba servicio de bar durante la celebración de un torneo de pádel en el que participaba el regidor y que, según la oposición, no disponía de la autorización pertinente. Fue el tercer punto el que centró el grueso del debate. Así el pleno analizó la gestión realizada por Reus en el seguimiento de la contrata del polideportivo. La oposición entiende que la actual concesionaria viene incumpliendo diferentes estipulaciones del contrato de concesión desde hace tiempo, algunos de los incumplimientos fueron citados por el regidor de On-El Pi, Antoni Cànovas. Pero solo en una ocasión se le ha abierto un expediente sancionador. Los partidos de la oposición entienden que hay motivos suficientes para iniciar un expediente de resolución del contrato de adjudicación a la concesionaria Rad Esport. La alcaldesa socialista, Natalia Troya, anunció durante la sesión que desde la alcaldía se asumirán las competencias de la contrata de la concesionaria, competencias que hasta este momento llevaba la regiduría de Deportes.

Por otro lado, Independents, socios de gobierno de los socialista, se abstuvieron en la votación de reprobación del edil al entender que había hechos que para ellos no estaba claro si habían sucedido, según explicó la portavoz Margalida Vives, quien también tuvo palabras de comprensión par la labor realizada por su compañero de gobierno. La abstención de los tres regidores de Independents supuso que la reprobación saliera adelante con los ocho votos de PP, On-El Pi y UP, y los seis socialistas en contra. Finalmente, la oposición retiraba el segundo punto del orden del día donde se pedía la dimisión del regidor.

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