Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Sóller encarga una nueva tasación de la Fàbrica Nova

El Ayuntamiento recurre a una empresa externa para que calcule el precio del antiguo equipamiento con el fin de presentar una contraoferta

La Fàbrica Nova cerró a principios de los años 70. J. Mora

El ayuntamiento de Sóller encargará a una empresa externa que elabore una tasación de la Fàbrica Nova, cuyos propietarios han recurrido ante el Jurado Provincial de Expropiación Forzosa para reclamar al municipio 4,3 millones de euros para su expropiación. Se trata de un proceso similar al que los dueños del Infante Lois llevaron a cabo hace unos años mediante el cual ahora Sóller debe pagarles 7 millones de euros para su expropiación.

Fuentes del Ayuntamiento explicaron que el municipio ha optado por recurrir a una empresa externa para que calcule el precio de la antigua fábrica, que además de estar catalogada como equipamiento por el Plan General de Ordenación Urbana el Consell de Mallorca la protegió elevándola a Bien de Interés Cultural (BIC).

El estudio económico servirá para que el ayuntamiento presente una contraoferta ante el organismo que se encarga de dilucidar las expropiaciones forzosas de Balears. Desde el Ayuntamiento estiman que la resolución de la demanda «puede tardar años en resolverse», aunque dan por hecho que de producirse la resolución será desfavorable a los intereses municipales «y tarde o temprano el Ayuntamiento deberá expropiar».

Presupuestos del Estado

Mientras el Ayuntamiento mueve su maquinaria para defenderse ante el Jurado de Expropiación, el PP de Sóller, a través de su grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados, ha presentado una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado para que el Ministerio de Industria incorpore una partida de 7 millones de euros para la compra del edificio y su posterior transformación en un museo textil.

En este sentido, el alcalde de Sóller, Carlos Simarro, reclamó la «colaboración» del PSOE y Podemos «para que desde sus respectivos grupos parlamentarios defiendan la enmienda y se incluya la partida en el presupuesto de 2021».

La Fàbrica Nova cerró sus puertas a principios de la década de los años 70 del siglo pasado ya que sus propietarios se acogieron a un plan de reconversión del sector textil. Pese a que su estado es lamentable tras el paso de casi cinco décadas, esta industria constituye el último ejemplo del pasado industrial que tuvo el valle con más de 14 fábricas de tejidos.

Compartir el artículo

stats