El ayuntamiento de Sóller ha ordenado el pago de 5,3 millones de euros para hacer efectiva la expropiación de los terrenos deportivos Infante Lois, por lo que el municipio pasará a ser el propietario de la instalación situada en el Port de Sóller que ocupa una extensión de más de 18.000 metros cuadrados. De este modo, Sóller zanja un largo contencioso con la propiedad que ha durado más de una década.
La junta local de gobierno prevista para mañana formalizará la expropiación forzosa de acuerdo a lo recogido en la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Balears, por lo que en los próximos días el Ayuntamiento hará la transferencia para saldar la expropiación. Quedarán por satisfacer los intereses de demora que el municipio prevé liquidar próximamente, según explicó la concejal de Hacienda, Andrea Pomar.
En este sentido, el pleno de la corporación se reunirá hoy en sesión extraordinaria para paralizar dos inversiones que el Consistorio preveía realizar en 2021 que suman, en su conjunto, 5,1 millones de euros. La paralización de estos proyectos es consecuencia de la sentencia relativa al Infante Lois, en tanto que el pago de la indemnización y la ejecución de los proyectos era económicamente incompatible. De lo contrario, el Ayuntamiento hubiera podido caer en déficit, por lo que se vería en la obligación de aprobar un severo plan de ajuste económico para los próximos años, por lo que las inversiones para estos ejercicios se hubieran visto seriamente limitadas.
Para llegar al punto de hacer efectivo el pago, el Ayuntamiento entabló unas negociaciones con los actuales propietarios del Infante Lois con el fin de explorar la posibilidad de pagar la expropiación en varios plazos y de estudiar posibles recalificaciones en otros terrenos con el fin de reducir el importe. Finalmente no hubo acuerdo y el Ayuntamiento pagará.
