Los alrededores de Raixa, la emblemática possessió ubicada en el municipio de Bunyola que fue adquirida por el Consell de Mallorca y el ministerio de Medio Ambiente en el año 2002, presentan un estado de abandono que nada tiene que ver con la elegancia y el fino estilismo que caracteriza a la finca que había sido propiedad del Cardenal Despuig. Uno de los predios que limita con la posesión, la finca de s’Heretat, acumula una gran cantidad de residuos de gran volumen entre los que hay coches abandonados, electrodomésticos y restos vegetales amontonados, entre otros escombros que, además del evidente impacto ambiental que provocan, suponen un atentado paisajístico a las puertas de la Serra de Tramuntana.
Miembros de la asociación vecinal de Palmanyola denuncian que los residuos se acumulan en la finca de s’Heredat desde hace tiempo y recuerdan que hace varios años se declaró un incendio forestal en esta misma zona como consecuencia, precisamente, de la gran cantidad de basura amontonada. No obstante, los residuos siguen allí mismo, con el consecuente peligro de que vuelva a generarse un incendio en la finca.
Fuentes vecinales lamentan que el Seprona “no ha hecho nada” para forzar la retirada de estos residuos durante estos últimos años.
Guardia Civil
De hecho, el pasado mes de mayo unos vecinos denunciaron ante la Guardia Civil la existencia de estos residuos en la finca de s’Heredat, que linda con el camino de Passatemps/Raixa, con un tramo cerrado al público. En esta parcela “se encuentran abandonados residuos (escombros), vehículos y además se han instalado unos panales de apicultura, desconociendo si las mismas se encuentran legalizadas”, según consta en el acta de la denuncia presentada ante la Guardia Civil hace unos meses.
Los vecinos denunciantes lamentan que no se priorice la limpieza de la finca de s’Heredat. “El municipio de Bunyola, donde está ubicada la incineradora de Son Reus, por lo que es uno de los más contaminados de la isla, debería ser vanguardista en temas de medio ambiente”, señalan.
Por su parte, desde la organización ecologista Gadma, con sede en Binissalem, también se han implicado en esta causa y denuncian el estado de degradación que presenta este sector de la finca de s’Heretat, recordando el incendio de hace unos años y alertando que podría volver a producirse un suceso similar si no se retiran los escombros y residuos acumulados.
Camino de Passatemps
Además de los problemas de acumulación de suciedad en la finca de s’Heretat, vecinos y grupos ecologistas denuncian que desde hace años un tramo de aproximadamente un kilómetro del camino de Passatemps/Raixa a su paso por Palmanyola, concretamente por las fincas de s’Heretat y Biniatzar, tiene el acceso cerrado a pesar de formar parte del catálogo de caminos públicos del ayuntamiento de Bunyola.
Por este motivo, el próximo fin de semana se llevará a cabo un acto reivindicativo organizado por los vecinos y Gadma para reclamar la apertura de este camino público en el que está previsto retirar algunas de las barreras que impiden el paso.
El problema viene de lejos. Las diferentes gestiones realizadas para reclamar la apertura del camino no han dado resultados. Hace cinco años se presentó en el Consell un escrito de alegaciones con recogida de firmas en el que informaban del cierre del camino.
Los denunciantes destacan que el cierre, además de impedir el paso por un camino público, “provoca la posible comisión de infracciones de diversa legislación”, como la habilitación de un puesto de caza del cual los vecinos desconocen si está autorizado, al igual que los panales de apicultura ubicados en la finca.
