El Ayuntamiento de Bunyola ha salido al paso de las críticas por el proyecto de construcción de 36 viviendas de lujo frente a la possessió de Can Mas, publicado por DIARIO de MALLORCA.

En un comunicado, el consistorio señala que la licencia se ha concedido de acuerdo con las normas subsidiarias de 1978, aún vigentes, que clasifican el terreno como urbano. Esto hace que deba "ceñirse a la ley en el momento de conceder la licencia" y que "no puede negarla". Además afirma que la concesión está avalada "por todos los informes preceptivos, urbanísticos y jurídicos" y sale al paso de las críticas por la estética de los edificios y los altos precios de las viviendas: una vez concedida la licencia, "es el promotor quien decide", señala.

El equipo de gobierno de Esquerra Oberta y PSIB-PSOE afirma que "comprende y respeta" el movimiento ciudadano contra el proyecto -materializado en la plataforma Salvem Can Mas- pero señala que "como gestores nos vemos obligados a manifestar que parar este proyecto es empujar al Ayuntamiento hacia contenciosos jurídicos que inevitablemente terminarían con sentencias contrarias y que obligarían a hacer frente a sentencias millonarias".

También afirma que el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que debe sustituir el de 1978, ya ha superado dos aprobaciones iniciales y que su tramitación continúa con el objetivo de "delimitar un modelo de crecimiento para el pueblo", que desde hace años está desfasado.

Finalmente, el consistorio señala tiene como aspiración "afrontar la posibilidad de construir promociones de viviendas sociales" en Bunyola, pero que para ello necesita un "suelo municipal" del cual ahora no dispone y, por el momento, ha considerado prioritarios proyectos como el de la escuela nueva o solucionar el del edificio multiusos de Can Gual, cuyas obras llevan paradas años.