Al presentar las bondades del presupuesto municipal de 2019, la alcaldesa resalta que las cuentas tienen por objetivo "mejorar la calidad de vida de los ciudadanos". Al fin ha descubierto que esta es la razón de ser de todo ayuntamiento y la justificación de su propia presencia en la casa consistorial lo cual, por otro lado, desvela el atraso y la desorientación en la gestión.
Este es el problema, aceptables actuaciones puntuales pero sin definición ni agenda programada de actuaciones para un municipio amplio complejo y diverso. En este plan, menos mal que tampoco hay grandes "proyectos estrella"en el presupuesto, como previene la regidora de Economía, porque entonces, con la brújula inactiva, todo podría acabar estrellándose. De todos modos, no deja de ser significativo que la mayor partida de inversiones se la lleven las instalaciones de la Policía Local, un cuerpo que no solo necesita reconversión material sino que, ahora mismo, está en expectativa de nueva estrella en su mando y que lleva demasiado tiempo dependiendo de fugacidades internas. Su firmamento no puede limitarse a infraestrutura, techo y cobijo.
