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Pasión por los aviones en miniatura

Los hermanos Juan y Daniel Guirao conservan más de mil maquetas de modelos reales de aeronaves comerciales y militares

Pasión por los aviones en miniatura

Los hermanos Juan y Daniel Guirao Navarro, vecinos de es Pla de na Tesa, han conseguido reunir una colección de más de mil maquetas, tanto de aviones comerciales como de transporte militar, todas ellas en perfecto estado. La mayoría de ellos pertenecen a modelos reales que han aterrizado en los aeropuertos de las islas.

Desde hace 35 años se dedican a coleccionar maquetas de aviones en las escalas 1/100 y 1/200, afición que les fue inculcada por su padre, que trabajaba en el sector, primero en Son Bonet y posteriormente en Son Sant Joan.

Entre las maquetas no podía faltar el avión que voló por primera vez, el de los hermanos Wright, que efectuó un vuelo de 100 metros el 17 de diciembre de 1902 y es considerado el primer vuelo de la historia.

En la colección figuran desde aviones de hélice que hicieron historia hasta los más modernos y cómodos a reacción, no faltando los primeros aviones de turbina que volaron a nuestras islas como el Caravelle o el DC-9, hasta llegar al Concorde o a los modernos Airbus 380 o el Boeing 747, más conocido como Jumbo. En una de las maquetas está representado el Air Force One (avión presidencial de EE UU) y entre los aviones de transporte militar está el C-5 Galaxy de la casa Lockheed.

Los Guirao conocen numerosas curiosidades, como la relacionada con los aviones Boeing 747 y Galaxy. "El gobierno estadounidense convocó un concurso para adjudicar la construcción de un avión que pudiera transportar tropa y material bélico, al cual se presentaron entre otros fabricantes la Lockheed y la Boeing con su Boeing 747; por ello el morro está diseñado así, ya que se ideó para el acceso del material militar; al no darle la adjudicación a la Boeing, la empresa decidió transformarlo para uso civil, resultando ser un éxito total", explican.

Del Boieng 747 tienen una enorme maqueta en la cual se puede observar el interior del avión con la distribución de los asientos. Mide 2,75 metros de largo por dos de ancho.

Entre las maquetas hay una de un DC-2 de las Líneas Aéreas Postales de España, con la bandera republicana en la cola. A partir del DC2, la compañía Douglas desarrolló el conocido DC-3, del cual existe un modelo a la entrada del aeródromo de Son Bonet como un homenaje a este avión que marcó toda una época en el transporte aéreo.

Otra de las maquetas que llama la atención es la del ATL-98 Carvair de Aviaco, que era un DC-4 reconvertido, el cual podía llevar hasta cinco coches y 23 pasajeros. Este avión hizo la ruta Barcelona-Palma y solamente aterrizó en Son Bonet, nunca lo hizo en Son Sant Joan.

Entre la colección no podía faltar tampoco una maqueta del Concorde, avión franco-británico que realizaba el vuelo París o Londres - Nueva York en tres horas y media. Se decía que llegaba antes de la hora del despegue, debido a la diferencia horaria entre Europa y los Estados Unidos.

Otro de los aviones famosos que surcaron nuestros cielos, también representado en la colección, es el Coronado, del cual existe uno en la Base Militar de Son San Joan.

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