A partir de anoche, en todo el barrio de Crist Rei de Inca se utilizará el sistema de recogida de basura puerta a puerta. El regidor de Servicios, Paco Verdejo, retiró ayer el último contenedor convencional de la zona.

"Con este acto hemos querido decir adiós al viejo sistema y saludar al nuevo, que nos permitirá conseguir aumentar la tasa de reciclaje", explicó Verdejo. Cabe recordar que la capital del Raiguer se encuentra a la cola del reciclaje con sólo un 8% y que la meta es llegar a un 50% en 2020.

Con el nuevo sistema de recogida de residuos se ha establecido un calendario semanal para cada fracción. Los vecinos tendrán que sacar la bolsa correspondiente delante de su portal en el caso de plantas bajas. En el caso de comunidades de propietarios medianas se han habilitado unos postes metálicos donde se podrán colgar las bolsas. En este sentido cabe abundar en que ha habido edificios que han pedido tener contenedores internos y sacarlos según el calendario fijado.

En cuanto a grandes edificios, se ha optado por una desechería móvil, ubicada en los alrededores de estos inmuebles, donde se podrán poner las bolsas de la fracción que toque por el calendario.

"La respuesta ha sido muy positiva, aun así, cambiar los hábitos de la gente llevará tiempo", comentó Verdejo.

Durante el último mes se han realizado un total de 15 reuniones informativas del nuevo sistema. Han sido encuentros de diferentes isletas de vecinos, hasta un total aproximado de 80 personas por reunión. Los técnicos han dado a conocer las particularidades de la recogida puerta a puerta y han dado respuesta a todas las consultas, según el Ayuntamiento. Esta acción se ha reforzado con informadoras que han visitado los casi 3.000 inmuebles que hay en Crist Rei, para repartir un folleto explicativo y resolver dudas. Según los técnicos, se cree que se ha podido llegar a un total del 70% de los residentes a la zona. Aun así, la tarea de información continuará y se reforzará, bien pronto, con la ayuda de las agentes medioambientales municipales.

Por otra parte, el presidente de la asociación de vecinos de Crist Rei explica que está recogiendo muchísimas quejas. "Tenemos la impresión de que todo se está haciendo demasiado deprisa y hay muchas dudas por parte de los vecinos". Ayer mismo, cuando aún no funcionaba el sistema, el contenedor que se había dejado para recoger el último de forma simbólica estaba lleno de basura a las 12 horas. En uno de los postes ya había bolsas colgadas, cuando no se pueden sacar hasta la tarde.