El Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB) gastará 700.000 euros en el alquiler y la reforma de un local que dejará de ser suyo en apenas nueve años. Se trata de tres espacios unidos en planta baja y situados en el número 44 de la calle Menéndez Pelayo, esquina con la avenida Baix des Cós, destinados a ser la nueva sede del SOIB en Manacor
De hecho el Govern hace un año que ya ha empezado a gastar parte de ese dinero en concepto de alquiler, sin que las oficinas se hayan trasladado aún desde la calle Jaume II donde están actualmente (el mismo inmueble donde están los juzgados de primera instancia). Lo que supone que desde el 1 de septiembre de 2016 el SOIB paga simultáneamente la renta de dos espacios de manera innecesaria.
Los 700.000 euros que el Govern va a desembolsar en diez años provienen, por una parte, de la suma de los 385.506 euros que costará dicho alquiler durante una década (cerca de 3.000 euros cada mes), y por otra de la licitación de las obras para adecuar los locales por un importe total de 308.038 euros (un precio base de salida que podría verse reducido). Dinero al que hay que sumar el alquiler del mencionado piso en la calle Jaume II, que no podrá ser desocupado hasta que finalicen los trabajos de reforma.
El Partido Popular local ya ha tildado de escandalosa la operación, ya que cree que con ese mismo dinero se habría podido comprar uno de los casales que en estos momentos se están ofertando en el centro histórico de la ciudad, y reformarlo. Históricos del partido como Toni Mercant han señalado en redes sociales que "urge una explicación" al respecto, tanto del gasto por una planta baja que no acabará siendo propiedad del Govern, como por la oportunidad perdida de hacerse con una vivienda de mayor superficie en el centro de Manacor.
Asimismo los populares creen que la reforma de un inmueble del centro ayudaría a que la zona creciera comercial y socialmente hablando. El Partido Popular cree que es un error también trasladar la sede del SOIB a un local alejado del área peatonal, dados los problemas, también, para poder aparcar cerca del futuro espacio, junto a Correos.
