El ayuntamiento de Sóller ha tenido que instalar barreras de seguridad en el exterior de uno de los edificios del complejo escolar de Ses Marjades debido a su precario estado de conservación. El vallado se suma al que se hizo en otro edificio de la misma escuela en junio pasado por recomendaciones técnicas. El edificio que ha sido parcialmente acordonado es el que se encuentra al pie de la calle. Las protecciones se han instalado en el lado que da a las escaleras por las que se acceden al resto de las dependencias de la escuela. La incorporación de nuevas medidas de seguridad, que evidencian el precario estado de conservación del centro escolar, se lleva a cabo los mismos días en los que el ayuntamiento de Sóller obtenido un segundo informe elaborado por sus técnicos que, al igual que los anteriores, detalla las deficiencias técnicas y estructurales que presenta la escuela. El estudio será remitido a la conselleria de Educación que lo había solicitado, que ahora también enviará a sus propios técnicos para preparar un informe alternativo que servirá para contrastar con el que ha elaborado el municipio. Fuentes técnicas municipales señalaron que el reporte recoge "la acumulación de deficiencias" que viene acumulando desde hace años el complejo educativo.A diferencia de un informe anterior que se centró en un solo edificio, esta vez se extiende a los tres edificios que componen la escuela.