El pasado 1 de abril comenzó la temporada de pesca de langosta. Se trata de la campaña más importante para el sector artesanal debido a la buena cotización de este producto.
Sin embargo, este año han comenzado pocas barcas a faenar. Las razones principales son dos. Por una parte, el mercado local, que es el principal al que se abastece, está aún muy poco receptivo. Por otra parte, las condiciones del mar no son ideales todavía.
Gaspar Vera, patrón del Petit Fuat, apunta que "este año las fiestas de Pascua han caído muy pronto y a pesar de que los restaurantes y hoteles están abiertos aún no hay demanda de langosta fresca".
Joan Suau, patrón mayor de la cofradía de Pollença, apunta que "la temperatura del agua ahora mismo es más fría que en noviembre y diciembre y el crustáceo no se mueve igual".
Cabe destacar también que estos primeros días de pesca ha habido temporal, con viento dominante de Tramuntana, por lo que se ha podido faenar poco.
Gabriel Payeras, patrón mayor de Alcúdia, apunta que "lo normal es que a principios de mayo ya salgan a por langosta todas las barcas que se han inscrito. Ahora mismo el precio no es bueno y lo normal es guardar lo que se saca".
