El Centro Internacional de Tenis Rafael Nadal podría ser la solución para paliar la crisis económica de Manacor a corto y medio plazo. Así lo cree su alcalde, Antoni Pastor, quien prevé que el complejo deportivo pueda reportar beneficios inmobiliarios de forma directa para la ciudad e indirectamente para todo el municipio.
Se espera que en poco más de un año ya empiecen a verse los resultados, precisamente cuando el próximo mes de septiembre de 2015, está previsto que el centro comience a funcionar en su primera fase con un edificio académico, la residencia para las jóvenes promesas y las pistas de entrenamiento y perfeccionamiento en marcha. "Muchos de los padres y familiares de los 70 alumnos que acudan internos en el Centro Internacional de Nadal, van a querer estar junto a ellos, por lo que van a querer alquilar o comprar viviendas como segundas residencias en Manacor", explica Pastor, en un argumento similar al de los artífices del proyecto.
A ellos se les sumarían "los posibles fans y admiradores" del número dos del mundo, así como trabajadores de las instalaciones sin residencia en la isla. "Es lo que ha pasado por ejemplo con la academia Sánchez-Casal de Barcelona, donde a partir de ella se ha generado una importante oferta complementaria".
El nuevo Centro Internacional quiere seguir la estela y fijarse, aunque sea de forma inicial, en la forma de funcionar de la academia de tenis que Emilio Sánchez Vicario y Sergio Casal tienen en Barcelona y que acaba de cumplir los 15 años con éxito. La academia de los ex tenistas cuenta con un campus residencial que consta de un gran edificio que ofrece habitaciones individuales y dobles, bungalows y hasta seis apartamentos de alto standing separados del resto. Además, estudios y entrenamiento de alto rendimiento van de la mano, con un sistema de enseñanza americano y en inglés adaptado a las necesidades de cada estudiante y un programa de becas deportivas para acceder a universidades de Estados Unidos.
Situada en el Prat del Llobregat, muy cerca del aeropuerto, la academia ha conseguido dar un empujón inmobiliario de la zona y al municipio, donde en una década se ha incrementado notablemente la ocupación de viviendas cercanas. Además se prevé que los nuevos vecinos manacorins llegados de todo el mundo, tengan un poder adquisitivo medio-alto, por lo que también podrían consumir e invertir en Manacor.
"Tenemos la suerte de que Rafel haya querido que el primer centro de estas características esté en Manacor. Sé que ha tenido otras ofertas de otros países para que pudiera instalar su complejo, quizás con mejores condiciones", apunta Pastor. Varios han sido los estados que han tanteado la posibilidad de que Nadal montara un centro internacional, incluso sin que el deportista tuviera que desembolsar la cantidad de dinero que sí tendrá que sufragar para el centro privado de Manacor, que comenzará a construirse tras el verano muy cerca de la Torre dels Enagistes de Manacor (a medio kilómetro de la ciudad), con un coste inicial aproximado de 14 millones de euros.
