La situación actual del ´ferreret´ permite ser optimista. Oficialmente es una especie que sigue en peligro de extinción, aunque la realidad es que en los últimos veinte años la población se ha duplicado gracias a la eliminación de depredadores naturales, principalmente la serpiente de agua, y a la habilitación de centros de seguridad para las crías como la existente en la finca pública de Planícia. La finalidad de este centro de conservación es la de guardarse "un as en la manga" en caso de alguna nueva enfermedad que afecte a los anfibios.