El municipio natal de Feliciano Fuster, Santa Margalida, será finalmente uno de los más beneficiados por el testamento del que fuera presidente de Endesa entre 1984 y 1997, fallecido en Palma el pasado 4 de marzo a la edad de 87 años. Por voluntad expresa de Fuster, el ayuntamiento ´margalidà´ recibirá ni más ni menos que el 60% de toda la colección de pinturas que atesoraba y que en la actualidad se encuentra dispersa entre las numerosas propiedades inmobiliarias que el ingeniero superior industrial de origen ´vilero´ poseía en diferentes enclaves geográficos de España. Además, buena parte de la biblioteca de Fuster también pasará a ser propiedad del municipio de Santa Margalida.
Según ha podido saber este diario, el testamento de Fuster dona específicamente al ayuntamiento de Santa Margalida seis de cada diez cuadros que están ubicados en cada una de las viviendas que fueron de su propiedad. Las obras de arte deberán ser destinadas a su exhibición en el propio Consistorio o bien en dependencias municipales como el centro de Cultura o la antigua Escuela Graduada, entre otras posibilidades.
El testamento del expresidente de Endesa no diferencia entre las pinturas que pasarán a ser propiedad del ayuntamiento de Santa Margalida y las que se quedarán en la vivienda en la que se ubican en la actualidad, y simplemente fija los porcentajes. A modo de ejemplo, si en un inmueble propiedad de Fuster se exhiben diez cuadros, seis pasarán a ser del consistorio ´margalidà´ y los cuatro restantes se quedarán en la vivienda. La única pista que ofrece el testamento sobre los criterios que deberán definir la selección de las pinturas se basa en factores subjetivos como la "mayor o menor armonía" que un cuadro en concreto guarde con respecto a la vivienda en la que está situado.
Feliciano Fuster era un gran conocedor del mundo del arte y llegó a ejercer, incluso, de asesor artístico de importantes potentados como Esther Koplowitz. Por ello, es fácil intuir que la colección que, en su mayor parte, pasará a ser de titularidad municipal es rica en obras de arte de referencia y muy valiosa desde el punto de vista económico. El ayuntamiento de Santa Margalida deberá exhibir las obras de arte y, en ningún caso, hacer negocio.
Libros para la biblioteca
El municipio de Santa Margalida también se beneficiará de gran parte de la voluminosa biblioteca de Feliciano Fuster. La donación de los libros sigue el mismo patrón que en el caso de los cuadros, aunque el porcentaje asciende al 80% del total. Las últimas voluntades del ingeniero concretan que ocho de cada diez libros actualmente dispersos en las diferentes viviendas de su propiedad formarán parte de su aportación a la biblioteca municipal de Santa Margalida. En este caso, el donante ofrece al beneficiario de la vivienda la posibilidad de decidir qué libros quiere que se queden en el inmueble siempre que considere que alguno de ellos contribuye al objeto al cual se destinará la vivienda en función del testamento.
El testamento de Feliciano Fuster señala que sería del agrado del donante que los volúmenes publicados que finalmente pasen a ser propiedad del Consistorio de Santa Margalida estén protegidos en estantes especialmente creados para la colección y que se indicase el nombre del donante.
En lo que respecta a los muebles de las diferentes viviendas que formaban parte de la propiedad de Fuster y que ha donado a diversas instituciones, se quedarán en su totalidad en los mismos inmuebles que ocupan.
