Hoy curiosamente podemos encontrar en Lluc al blavet de mayor edad, el padre Bartomeu Pericás, de 94 años, que ingresó en la Escolanía en 1927, y al más joven, Joan Miquel Payeras, de siete años. Los dos son de Campanet.

Es el segundo año que Joan Miquel está en Lluc y lo que más desea es poder jugar a fútbol, así como adquirir golosinas, aunque sea una sola vez a la semana, cuando tienen un tiempo para ver la televisión después de la cena. Por lo que respecta a los estudios, lo que menos le gusta son las tareas escolares que le mandan fuera del horario lectivo y está encantado cuando en la clase toca usar el ordenador.