La rotura de una cañería de aguas residuales poco antes de las 17 horas de este martes ha obligado a la empresa municipal Emaya a cerrar la playa de Ciutat Jardí.

La conducción procede de la depuradora del Coll d'en Rabassa, la llamada EDAR 2, y el líquido ha sido vertido al torrente Gros, que desemboca en la playa, por lo que los bañistas han sido avisados por los socorristas y la Policía Local, que ha señalizado la zona para evitar posibles infecciones.

La bandera roja permanecerá izada hasta que sea reparada la avería. Los operarios de Emaya han controlado el vertido en menos de una hora, aunque los usuarios de la playa no podrán volver a utilizarla hasta que la empresa municipal realice las pertinentes analíticas del agua del mar y se conozca el resultado.