La recientemente nombrada secretaria de Estado de turismo, Bel Oliver, además de las numerosas ocupaciones que seguramente requerirán de su tiempo, conocimientos y ocupación en todo el territorio estatal, deberá dedicar una parte a desentrañar el embrollo provocado por su antecesor con el Consorcio de la Platja de Palma. De entrada, el Govern y el departamento de Oliver no se ponen de acuerdo ni siquiera en qué cantidad de los 20 millones que el Estado transfirió al Consorcio para la ejecución de distintos proyectos se gastaron en realidad. El Govern afirma que se han ejecutado ocho millones, por lo que, solo debería "devolver" doce, mientras que la secretaria de Estado de Turismo solo reconoce un gasto de seis, y reclama al Ejecutivo autonómico catorce. Sean doce o sean catorce los millones que se deben devolver, se trata de cantidades que no se va a invertir en la zona turística, a pesar del agravio que supone que el anterior Gobierno haya formalizado convenios específicos de gasto para determinadas zonas turísticas maduras. Además, Oliver no podrá alegar desconocimiento de la situación aunque solo sea por su paso como concejala socialista en el Ayuntamiento de Palma entre 2003 y 2007.
Fernando Rubio ya es funcionario de carrera
El concejal conservador en Cort y secretario general de la junta territorial del PP palmesano, Fernando Rubio, ya es funcionario de carrera. Ha aprobado las oposiciones como técnico superior de la Comunitat Autònoma, tras superar hace unos días el único examen práctico junto a otros 23 opositores. Su situación en el Ayuntamiento no variará, ya que desde finales del pasado mes de mayo, cuando fue nombrado para ocupar una plaza como interino en la dirección general de Arquitectura del Govern, tiene dedicación parcial en lugar de la exclusiva. Ayer tuvo que votar en las elecciones internas de su partido por la tarde, una vez finalizada su jornada laboral, aunque se quedó en la sede central hasta tarde.
Una reliquia informativa en la antigua cárcel
Alguien que estuvo en la enfermería de la antigua cárcel de Palma en 2oo3 estaba muy interesado en los líos internos del PP palmesano, como se demuestra con la portada de este periódico encontrada recientemente en el anterior recinto carcelario.
