Acabar con los prejuicios, dar visibilidad a la diversidad y mejorar la competencia lingüística es el objetivo del Banc de Cultures del Ayuntamiento de Palma, que desde finales de 2014 organiza talleres, charlas y pone en contacto a personas de diferente procedencia y religión.

Sin embargo, las responsables de la organización de las actividades reconocen que quienes participan de este peculiar banco de tiempo lingüístico y cultural suelen ser muy abiertos de mente.

De las 176 personas que de un modo u otro acuden al Banc de Cultures, un 45% es de nacionalidad española y la gran mayoría son mujeres.

La pasada semana tuvo lugar una conferencia sobre el ramadán. "Cuando haya un celebración importante de algún país o cultura, hemos decidido hacer una charla", indican desde este servicio. Está prevista la visita a una mezquita y a un templo sij, al igual que anteriormente se han organizado talleres de caligrafía china o se han visitado sus comercio en Pere garau, informan desde el Banc de Cultures. "La comunidad china es más abierta de lo que se cree", añade una de las responsables de este servicio.

El Banc de Cultures, con sede en el edificio Flassaders, podría tener próximamente una extensión, ya que sus responsables tienen en proyecto crear uno específico para jóvenes.