Dispuesto a luchar contra la corrupción y con ganas de mejorar la imagen del cuerpo. Esa fue la declaración de intenciones del nuevo jefe de la Policía Local, Josep Palouzié i Vizcaya, durante el acto solemne de toma de posesión. "No toleraré ninguna conducta que conculque las obligaciones de todos aquellos que, como yo, hemos decidido servir a la sociedad y a la ciudad de Palma", aseguró en su discurso de bienvenida.
La toma de posesión se celebró en el castillo militar de Sant Carles. Asistieron representantes de entidades vecinales, sociales o empresariales, además de miembros de las Fuerzas Armadas y el Cuerpo Nacional de Policía. También acudieron representantes del PSOE y de la oposición (PP y Ciudadanos), pero ningún regidor de Més ni de Som Palma. No obstante, el nombramiento de Palouzié fue pactado entre los tres partidos que conforman el gobierno local.
Se trató de un acto sin precedentes, al que asistió casi un centenar de agentes municipales de todas las unidades. Con anteriores jefes policiales el escenario para su recibimiento era la sala de plenos de Cort o bien el cuartel de Sant Ferran. Sin embargo, el tripartito de gobierno quiso cargar de pompa la llegada de un agente policial de la península que tendrá como misión poner orden y limpiar las manchas de corrupción en un cuerpo formado por 900 funcionarios.
"Estoy convencido de que entre todos conseguiremos borrar cualquier duda respecto de la honorabilidad" de la Policía Local, agregó Palouzié, quien ha ejercido como jefe en la Policía Municipal de Girona durante dos décadas.
Su fórmula para recuperar el prestigio perdido consistirá en dar "un buen servicio, de calidad y de proximidad". Señaló que el primer paso será implantar un nuevo organigrama policial, que ya ha sido aprobado por el equipo de gobierno. Y dijo ser consciente de que todos los cambios le supondrán un "reto personal y profesional" que será "complicado".
Afirmó que la única información que tiene de los múltiples casos de corrupción que se están investigando en la Policía Local de Palma es la de los medios de comunicación. Por ello, pidió prudencia y un tiempo de adaptación antes de comenzar a desarrollar cambios. "Claro que sé dónde me meto. Si no, no habría venido. Tengo 58 años y tranquilamente me podría haber jubilado en Girona. No ha sido esta mi opción", destacó.
El encargo que ha recibido de parte del alcalde de Palma, el socialista José Hila, es recuperar la policía de proximidad y que haya más agentes en la calle. "Damos un paso más en la renovación de la Policía Local que emprendimos hace un año, después de que una minoría se aprovechara del uniforme para cometer presuntamente delitos. Le he hecho el encargo al nuevo jefe de Policía de que sea más próxima al ciudadano, con las figuras del policía de barrio o del policía tutor", manifestó el munícipe del PSOE.
Para ello, Hila apostó porque el cambio en el organigrama policial se aleje del modelo de la Policía Nacional: "Nosotros queremos que el policía esté a pie de calle, guardando un equilibrio entre seguridad y proximidad".
Destacó que la persona elegida para lavar la imagen del cuerpo municipal sea un agente externo a Ciutat. "Una persona que viene de fuera viene libre de cualquier hipoteca y tiene las manos libres para tomar cualquier decisión necesaria para renovar la Policía", resaltó el alcalde. Hila también recalcó la amplia trayectoria policial de Palouzié: "Es una persona con mucha experiencia. Nos da la confianza para que afrontemos este proceso de renovación necesario".
