En el transcurso del debate sobre la propuesta de protección de comercios singulares presentada por Ciudadanos, se puso el ejemplo de París, ciudad que, según la concejala de Turismo y Comercio del Ayuntamiento de Palma, Joana Maria Adrover, "ha destinado 100 millones a la adquisición de los comercios singulares incluyendo sus existencias". Según la concejala, "se trata de algo inalcanzable para nosotros y que no nos podemos permitir", opinión con la que también estuvieron de acuerdo los concejales del PP y Ciudadanos.

Por su parte, este último grupo municipal manifestó que también disponen de información de Roma sobre esta cuestión, ciudad que ya dispone de un plan de protección de los comercios emblemáticos. Barcelona es otra de las ciudades que está elaborando una normativa en este sentido, aunque aún no está aprobada.

La propuesta de Ciudadanos incluye la posibilidad de que el plan contemple distintos niveles de protección de los establecimientos en función de su valor patrimonial, época a la que pertenece y estilo, entre otras.

Por ello consideran que "estos niveles deberían abarcar desde una protección integral para establecimientos de gran interés, en los que no se pueda modificar ningún elemento, a otros que dispongan de protecciones parciales". Ciudadanos propone que, además de proteger el inmueble, también se haga lo propio con las actividades, algo que no es posible por ley.