El Ayuntamiento de Palma estudia distintas fórmulas que posibiliten la inversión privada en el edificio de Gesa y permitan al mismo tiempo mantener el uso público del inmueble de propiedad municipal.
El teniente de alcalde de Urbanismo, Jesús Valls explicó que el avance del nuevo Plan General, además de mantener la preservación del inmueble ordenada por el Consell de Mallorca como Bien Catalogado y confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de Balears prevé que el edificio sea un equipamiento administrativo de uso público.
Lo anterior no debe significar, no obstante, que la inversión necesaria para rehabilitar el inmueble, fijada en el anterior mandato en varios millones de euros, deba proceder de las arcas municipales, de ahí la necesidad de que la iniciativa privada pueda participar en la rehabilitación del edificio.
De todas formas, según Valls, la cuestión más inmediata en estos momentos en relación a los solares de primera línea se refiere a la negociación que deberá mantener el Ayuntamiento de Palma con Endesa, la nueva propietaria de los terrenos asignados a Núñez y Navarro.
El teniente de alcalde confirmó que desde que el pasado mes de julio el Tribunal Supremo anulara el contrato de compraventa del edificio de Gesa y los dos solares anexos, suscrito en 2005 entre la compañía eléctrica y Núñez y Navarro, se han mantenido varios contactos con la nueva propiedad. No obstante, cualquier decisión tendrá que esperar a la ejecución de la sentencia, algo que aún no se ha producido, dada la complejidad de este trámite y de la cantidad de dinero que está en juego, una cifra que, con los intereses de demora y el pago de las costas puede alcanzar los 140 millones, que deberá abonar la eléctrica a la constructora.
Si bien el hecho de que las propiedades que antes eran de la constructora catalana ahora sean nuevamente de Endesa puede, en principio, facilitar la negociación entre el Ayuntamiento de Palma y la compañía eléctrica con el fin de alcanzar un acuerdo que permita el desarrollo de los solares de la primera línea sin el temor de resoluciones judiciales en contra, pero hay varias cuestiones que tendrán que esperar. Entre ellas, la resolución del recurso interpuesto por Cort ante el Tribunal Superior de Justicia de Balears contra la sentencia que obliga a realizar una nueva reparcelación teniendo en cuenta el valor del edificio de Gesa y con la posibilidad de tener que asignar más metros cuadrados en segunda línea a los nuevos propietarios que los inicialmente concedidos.
Por el momento, Endesa y Núñez y Navarro no se han puesto de acuerdo en la ejecución de la Sentencia del Tribunal Supremo, que anula la operación de compraventa realizada en 2005. Una vez que Endesa vuelva a ser la propietaria de los solares, habrá que ver si se subroga o no los más de 20 contenciosos que ha ido interponiendo Núñez y Navarro contra todas las actuaciones urbanísticas realizadas por Cort desde que, en el mandato de Aina Calvo y a raíz de la catalogación por el Consell del edificio de Gesa, se modificó la calificación urbanística de los solares de primera línea pasándolos de uso residencial a equipamientos y zona verde.
