Los quince concejales del equipo de gobierno aprobaron ayer de forma definitiva los primeros presupuestos del actual mandato con los votos en contra del PP, partido que también manifestó sus dudas en relación a la legalidad del acuerdo por cuanto no se habría convocado la audiencia pública con los quince días de antelación previstos en el reglamento. La alcaldesa, Aina Calvo, manifestó que se trata de unas cuentas que representan "un cambio" en relación a la política municipal ejecutada en las últimas legislaturas y que permitirán hacer frente a "una problemática crónica del Ayuntamiento como son las expropiaciones". Las cuentas para el próximo año alcanzan un montante de 643 millones incluyendo además del presupuesto propio el de las empresas municipales, institutos y organismos, lo que supone un descenso del 0,99% en relación al presente año. El concejal conservador Julio Martínez, además de poner en duda la legalidad del acuerdo, aunque dijo que no recurrirían, recriminó al equipo de gobierno el escaso talante negociador puesto que no ha aceptado ninguna de las enmiendas relevantes presentadas por su grupo, los sindicatos o entidades ciudadanas y agrupaciones empresariales